Las forenses testifican que el joven de Sonseca murió de "varios golpes en la cabeza"

Toledo.- Las médico forenses que hicieron la autopsia al joven de Sonseca Jose Félix García-Ochoa han afirmado hoy que "lo más probable" es que la víctima falleciera a consecuencia de "varios golpes" en la cabeza y no de uno solo como sostienen las defensas de los tres acusados.

En la segunda sesión del juicio con jurado que se sigue en la Audiencia de Toledo contra Adrián D.G.V., Mario R.C. y Fernando G.C. declararon como peritos las médico forenses Celeste Mata y Raquel Díaz, quienes afirmaron "sin ninguna duda" que Jose Félix murió por las lesiones mortales que le produjeron varios de los "múltiples golpes" que tenía en la cabeza.

Precisaron a preguntas de las defensas que si bien en sus primeras conclusiones sostienen que la muerte la pudo producir bien un solo golpe infligido con una "grandísima intensidad" como el que se puede producir, por ejemplo, en un accidente de tráfico, tras analizar todos los informes médicos hospitalarios y toxicológicos, "deducen" que la muerte de Jose Félix se produjo por "varios golpes".

Estos golpes en la cabeza, sobre todo en la parte frontal y lateral derecha, produjo en la víctima un efecto continuo de vaivén en el cráneo que le desplazó éste y le provocó un hematoma epidural comprimiéndole el cerebro con hemorragia interna y falta de oxígeno, lo que obligó a los médicos a practicarle una craneotomía para evitar la muerte cerebral.

La situación neurológica era tan grave que las forenses han llegado a decir que José Félix necesitaba un cerebro nuevo para sobrevivir, puesto que con el que tenía "era imposible".

Por su parte, las doctoras que atendieron a Jose Félix durante su estancia en la UCI del hospital de Toledo indicaron que si bien mejoró su respiración y se le retiró la ventilación mecánica, su daño neurológico era "muy importante", puesto que "la mayor parte de su cerebro no funcionaba".

Sobre si el hematoma epidural que presentaba José Félix en el cerebro se pudo producir por un solo golpe, las doctoras sostuvieron, al igual que las forenses, que "lo más probable" es que se debiera a un mecanismo de vaivén del cerebro por varios golpes.

Tras escuchar los informes periciales, el abogado defensor de Adrián, el único de los tres acusados que ha reconocido haber golpeado a Jose Félix con una patada en la cabeza, ha endurecido su petición de pena en un año más de cárcel.

Así, Luis Soriano, que inicialmente solicitada cuatro años de prisión para Adrián por un delito de homicidio imprudente, ha calificado la conducta de su patrocinado de homicidio con las atenuantes de arrebato y obcecación, y ha pedido cinco años de cárcel, mientras que a los otros dos acusados solo les atribuyen las defensas las faltas de daños en la vivienda y lesiones.

Tanto el fiscal como la acusación particular han mantenido en sus conclusiones definitivas las penas de veinticinco años de cárcel por un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento para cada uno de los tres acusados.

José Félix García-Ochoa murió el 4 de abril de 2008 en el hospital de Toledo después de estar más de un mes en la UCI a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico a causa, según las acusaciones, de la brutal paliza (patadas y puñetazos) que le propinaron los tres acusados, con los que previamente había tenido una bronca a las puertas de un bar de copas por una cuestión banal.