Montevideo, 3 oct.- Los dos activistas por la liberación de la marihuana en Uruguay, que habían sido detenidos tras recibir semillas de cannabis desde España, fueron hoy liberados, confirmaron distintas fuentes.
Los activistas son la presidenta de la Asociación de Estudios sobre el Cannabis del Uruguay (AECU), Laura Blanco, y su pareja y asesor de la organización, Juan Vaz.
En un paquete llegado por correo aéreo de España, la pareja recibió semillas de distinto tipo de cannabis, cuyo consumo de marihuana no está penado en Uruguay, pero sí su producción y venta.
Como parte del procedimiento policial se allanaron sus viviendas, donde se encontraron plantas de marihuana, y los detenidos fueron puestos a disposición de la Justicia, que esta tarde los liberó sin cargos, explicó Blanco a Efe.
Blanco detalló que el paquete procedía de San Sebastián (norte de España) y al descubrir su contenido en el Aeropuerto Internacional de Carrasco (de Montevideo) las autoridades aduaneras decidieron detenerlos e interrogarlos porque la asociación aparecía como destinataria.
La activista aclaró que no sabía del origen de las semillas aunque dijo no haberse sorprendido porque desde que el presidente uruguayo, José Mujica, anunció que iba a promover una ley para despenalizar la marihuana ha recibido toda clase de cartas y objetos desde el exterior relacionados con la marihuana.
"Quedó demostrado momentáneamente que no había nada que demostrara que yo había pedido eso. Mandan muchas cosas a mi nombre y de la asociación porque muchas empresas están interesadas en el negocio, en intervenir, en que le hagamos un puente con el Gobierno", relató.
Blanco sostuvo que en cualquier caso en el envío del paquete "no hay narcotráfico" porque "la semilla no está regulada, no está en la lista de sustancias prohibidas por la Convención de Ginebra".
"Lo que está prohibido son las flores, las llamadas humedades floridas. Vieron esa cantidad de semillas y se asustaron", agregó la activista.
El Gobierno uruguayo presentó en agosto pasado un proyecto de ley al Parlamento para legalizar la compra-venta de marihuana y hacer que el Estado se encargue de su producción y distribución con el objetivo de "quitar parte del mercado" a las mafias del narcotráfico
La iniciativa de Mujica generó tantas críticas como apoyos a nivel nacional e internacional.
El mandatario, un exguerrillero de 77 años que estuvo 14 años en la cárcel por su lucha armada, la mayoría durante la dictadura (1973-1985), dijo que si prospera su iniciativa el país plantará unas 150 hectáreas de cannabis para cumplir con la demanda de los consumidores.
"Llevamos 50 años buscando por la vía policial y estamos fracasando", afirmó Mujica, que también anunció su intención de realizar encuestas oficiales sobre el tema y prometió suspenderlo si queda en evidencia el rechazo de la ciudadanía al asunto.
Sondeos privados realizados antes del anuncio del gobernante indicaron que el 60 por ciento de los uruguayos es contrario a despenalizar la producción y venta de marihuana.
Según datos oficiales, unas 300.000 personas, casi el 10 por ciento de la población uruguaya, admiten haber consumido alguna vez marihuana y entre 127.000 y 150.000 lo hacen con regularidad, lo que genera un negocio de 75 millones de dólares anuales.
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