Cuatro puntos de nueve posibles, fútbol bastante mejorable en los tres partidos… ¿Ha perdido la ilusión por la Liga el Real Madrid? El entrenador del equipo blanco, José Mourinho, cree que no, pero no está nada satisfecho con lo que han hecho hasta el momento sus jugadores. "La pasada temporada, si podíamos meter cinco goles no queríamos tres, queríamos matar el partido antes del descanso. El equipo tiene que jugar mejor y trabajar más. No es suficiente con sacar los puntos" ha dicho el técnico portugués tras el choque contra el Granada.
Lo cierto es que se ve peor físicamente al equipo que la campaña anterior en el inicio del campeonato, aunque enseguida surgen las voces que dicen que el objetivo en este nuevo curso es llegar más fresco a los meses de abril y mayo donde en teoría se jugará el Real Madrid los títulos. Sin esa frescura física, el bloque se resiente y ya no apabulla a los rivales, que se le suben a las barbas. Valencia y sobre todo Getafe lo hicieron.
Además, juega en contra de Iker Casillas y sus compañeros el estar ya a cinco puntos del Barcelona, aunque ese hecho se ha minimizado tras conquistar la Supercopa de España ante el eterno rival en el Santiago Bernabéu. Hace una temporada, tenía seis puntos y estaba a uno del equipo de Pep Guardiola, pero con mejores estadísticas (10 goleas a favor y 3 en contra) de las que luce en el presente ejercicio (5 goles a favor y 3 en contra).
Para más inri, Cristiano Ronaldo ha generado dudas con sus declaraciones sobre que no está contento. En el club no entienden por qué, pero lo que ha dicho el portugués no ayudará a que la semana del partidos de selecciones sea apacible en el Real Madrid, ni mucho menos.
La crisis del Barcelona es más de juego que de resultados. Los de Tito Vilanova son los únicos que han sumado el pleno de nueve puntos, aunque ese registro es un poco tramposo. Ante Osasuna pudo perder en la segunda jornada y de hecho venció 1-2 tras remontar el gol rojillo. Ante el Valencia, el partido de los azulgranas fue bastante discreto, sobre todo en la segunda parte en la que apenas llegaron a crear ocasiones de peligro.
Si en el Real Madrid los ojos miran a Cristiano por sus declaraciones (su sequía goleadora ya es historia), en el Barcelona dos jugadores concitan la atención. El primero es Lionel Messi. El argentino está falto de forma, como casi todos sus compañeros, y eso se ve en los partidos, donde intenta muchas cosas pero le salen pocas porque no tiene chispa. De todas formas, cumple en la faceta goleadora.
El otro futbolista es Cesc Fàbregas, al que Tito Vilanova no encuentra un hueco en el esquema y a quien sustituye cada vez que entra en el once titular. Precisamente, el nuevo entrenador del Barcelona también genera dudas sobre su valía. En su caso, la sombra de Guardiola es muy alargada y sólo saldrá vencedor el discípulo en su duelo con el maestro si logra que el Barcelona juegue como la pasada temporada, aplastando a sus rivales. Dos puntos menos llevaba el Barcelona hae un año, pero sus estadísticas goleadoras eran mejores (15 tantos a favor y dos encontra).
Sigue @jorgekosky
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