Llega al Liceo "La Valquiria" de resonancias contemporáneas y ecológicas

  • El Gran Teatro del Liceo presenta desde el lunes la ópera de Richard Wagner "La Valquiria", la segunda de la tetralogía "El anillo del nibelungo", en un montaje de resonancias contemporáneas y ecológicas, bajo la dirección escénica del canadiense Robert Carsen y musical del catalán Josep Pons.

Barcelona, 16 may.- El Gran Teatro del Liceo presenta desde el lunes la ópera de Richard Wagner "La Valquiria", la segunda de la tetralogía "El anillo del nibelungo", en un montaje de resonancias contemporáneas y ecológicas, bajo la dirección escénica del canadiense Robert Carsen y musical del catalán Josep Pons.

Grandes voces wagnerianas como Iréne Theorin, Anja Kampe, Klaus Florian Vogt, Eric Halfvarson o Albert Dohmen volverán a dar vida a Siegmund, Hunding, Wotan, Sieglinde o Brünnhilde, los personajes de esta obra, que el director artístico saliente de la institución, Joan Matabosch, considera como "más actual que nunca".

Como ya ocurría en "El oro del Rin", Carsen ha apostado por trasladar la obra, en la que no se obvia "la capacidad destructiva del poder" y el proceso de degradación de la naturaleza, a la época contemporánea.

"El anillo del nibelungo" es un ciclo de cuatro óperas que tiene como hilo conductor la posesión de un anillo mágico, forjado por el nibelungo Alberich, que otorga a quien lo posee el dominio del mundo, a cambio de la renuncia al amor.

Todos los habitantes de este mundo -dioses, hombres y nibelungos- están dominados por el deseo de poseer el anillo, excepto Siegfried, un héroe libre de los anhelos del poder.

Carsen ha indicado hoy que la ópera supone un "reto extraordinario", tanto por la mitología de la que trata como "por la fuerza de la música y la necesidad de explicar la historia como algo vivo de nuestros días".

En este punto, ha comentado que cree es la "más directa, clara y emocional" de las piezas de la tetralogía.

Además, en este proyecto busca el contraste a lo largo de la representación entre la nieve, especialmente presente en la primera parte, y el fuego.

Por otra parte, algunos de los personajes se identifican con grupos sociales fáciles de reconocer para el espectador de hoy, con el personaje de Hunding dirigiendo una banda de traficantes de armas.

Sin embargo, tal y como ha apuntado la soprano Iréne Theorin, "aunque esta sea una producción muy moderna, es muy fiel a la historia original, tal como la contó Wagner".

A la vez, entiende que para una cantante demanda "mucha técnica y mucha disciplina".

"Para cada nueva producción en la que participo -ha proseguido- me gusta hacer un esfuerzo y empezar de cero, huyendo de clichés y soluciones aprendidas".

El director artístico, Josep Pons, ha opinado que Wagner lo lleva todo al límite, desde "la pericia instrumental, a las partes vocales", lo que supone un "'tour de force' enorme", y ha alabado a los cantantes que intervienen -en dos elencos diferentes- por entender que "son los mejores en el mundo en sus respectivos papeles".

A su juicio, cada uno de ellos ofrece "una lección constante" y ha calificado de "gozo inmenso" poder trabajar con estas voces.

El bajo barítono Albert Dohmen, que se pondrá en la piel de Wotan, ha destacado que todos los que intervienen se han convertido en una especie de familia, aunque no ha escondido que el escenario del Liceo "no es de los más favorables a la voz humana".

A la vez, ha dicho que espera que las dificultades económicas del teatro barcelonés estén pronto superadas y que "los políticos y los amigos banqueros tengan la sensibilidad de valorar la cultura que tenemos".

Las representaciones de "La Valquiria", con un 87,9 de las entradas vendidas, tendrán lugar los días 19, 22, 23, 25, 27, 28, 30 y 31 de mayo y el día 3 de junio, en una producción de la Bühnen der Stad Köln (Colonia), con la Orquesta Sinfónica del Gran Teatro del Liceo.

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