Bruselas, 14 mar.- Los jefes de Estado y de Gobierno de la zona del euro iniciaron hoy su reunión para analizar la situación de los Diecisiete y aprobar el reglamento de sus reuniones, una vez finalizada la primera jornada de la cumbre de los Veintisiete.
La cumbre de los líderes del euro participarán los presidentes del Eurogrupo y del Banco Central Europeo (BCE), Jeroen Dijsselbloem y Mario Draghi, respectivamente.
Los líderes debatirán en concreto la información que solicitaron al presidente del Consejo Europeo y de las cumbres de la eurozona, Herman Van Rompuy, sobre las reglas para la celebración de los encuentros de los líderes de los Diecisiete, y temas específicos de la unión económica y monetaria.
No se descarta que los mandatarios aborden también el futuro rescate de Chipre, aunque la canciller alemana, Angela Merkel, dejó claro que no tiene sentido hablar de algo que mañana analizarán los ministros de Finanzas y cuando aún no hay ningún informe de la troika -la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional- al respecto.
En octubre de 2011, los países de la eurozona decidieron que fuera Van Rompuy quien encabezara los encuentros de jefes de Estado y de Gobierno del área de la moneda única y que éstos se celebraran al menos dos veces al año y en momentos clave del ciclo anual de la gobernanza económica si se habían de convocar reuniones adicionales.
A estas cumbres también asiste el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso.
Este formato de cumbres de los países del euro se hizo más frecuente durante 2011 y 2012 como respuesta a la crisis de la deuda y financiera, especialmente aguda en la eurozona.
El borrador de las conclusiones de la cumbre referido a la eurozona revela que los líderes analizan el trabajo hecho desde diciembre para profundizar en la nueva arquitectura del euro.
Los líderes también pedirán que se cierre "en las próximas semanas" la negociación sobre el futuro supervisor bancario común, urgirán a un acuerdo sobre el rescate y la liquidación de bancos y el sistema de garantías de depósitos antes de junio y recordarán la importancia de que el marco operativo para la recapitalización directa de la banca esté listo dentro de tres meses.
También saludarán la intención de la Comisión de presentar en verano una propuesta para un mecanismo de resolución bancaria único para los países que participarán en el supervisor común.
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