Los dos policías muertos en Kabul habían ido para que sus familias viviesen mejor

    • Los dos policías eran agentes con una dilatada carrera dedicada al servicio público y acostumbrados situaciones extremas que decidieron viajar a Kabul para dar un futuro mejor a sus familias.
    • El subdirector Jorge Garcia Tudela, de 47 años, deja dos hijos. Por su parte, el policía Isidro Gabino San Martín, de 48 años, era padre de cuatro hijos
El subdirector Jorge Garcia Tudela y el policía Isidro Gabino San Martín
El subdirector Jorge Garcia Tudela y el policía Isidro Gabino San Martín

Asegurar el futuro de sus familias, conseguir un dinero extra y volver a casa con sus seres queridos. Cuando el subdirector Jorge Garcia Tudela y el policía Isidro Gabino San Martín eligieron un destino como Kabul eran conscientes del riesgo que corrían sus vidas y, aún así, decidieron libremente hacerlo. Los dos policías eran agentes con una dilatada carrera dedicada al servicio público y acostumbrados a situaciones extremas. Lo que no podían imaginar es que no volverían a abrazar a sus familias y que el atentado contra la embajada de España en Kabul fuera negado, en un principio por el Partido Popular, al ocurrir a solo una semana de las elecciones generales en España.

El ataque contra la embajada española empezó alrededor de las seis de la tarde de Kabul cuando un terrorista suicida estrelló un coche bomba contra uno de los muros de la Embajada. Durante el ataque fueron asesinados los dos policías españoles, el granadino Jorge García Tudela y el leonés Isidro Gabriel Santamartín. Al primero de ellos lo mataron cuando los asaltantes, que aprovecharon un hueco como consecuencia de la onda expansiva, entraron en el edificio ya que su habitación se encontraba en la planta cero del edificio. Su compañero fue abatido a tiros cuando salió a ver si lo encontraba, momento en el que los talibanes aprovecharon para dispararle hasta la muerte. El ataque se prolongó durante doce largas horas, según explica un agente que sobrevivió a la emboscada de los terrorista a través de la cuenta de facebook del policía José Manuel Sánchez Fornet. Los otros ocho agentes, que forman parte del equipo que vigila la seguridad de la Embajada en Kabul, sobrevivieron.

Monachil y La Bañeza, los dos pueblos de los que eran los agentes asesinados por los talibanes, han decretado tres días de luto. Las banderas ondean a media asta y las dos localidades lloran la pérdida de sus vecinos, muy queridos en ambos pueblos.

La muerte del granadino Jorge García Tudela, de 47 años, se conoció el sábado a primera hora. Con la luz del día y, una vez abatidos a los cuatro talibanes que perpetraron el ataque, apareció su cuerpo sin vida. La noticia empezó a correr por Granada donde estaba destinado en la Brigada de Policía Judicial, en el grupo de investigación del distrito norte, desde 1995, donde sus compañeros "están muy apenados por la trágica noticia". Su servicio en Kabul finalizaba el próximo 3 de enero. El subdirector García Tudela estaba casado y tenía dos hijos pequeños. Según relatan los vecinos de Monachil, a primer hora del sábado no se hablaba de otra cosa en campo de fútbol donde entrenaban algunos compañeros de los hijos del policía fallecido que tienen entre "doce y trece años". Jorge García Tudela llevaba tres meses Kabul. Había solicitado una comisión de servicio de cuatro meses en la sede diplomática para ganar un poco más de dinero y asegurar que su familia viviese un poco mejor.

El leonés Isidro Gabriel Santamartín deja cuatro hijos y una familia rota. De 48 años y natural El agente erainstructor de tiro y defensa personal y formaba parte de la Unidad de Intervención Policial (UIP), encargada habitualmente de la seguridad de las delegaciones diplomáticas en el extranjero. Un Unamigo suyo entre llantos recuerda a Isidro Gabino"le conozco desde hace años de la academia y hemos compartido destino. Todo lo que te pueda decir de él es poco, pero destacaría la entrega a su profesión y a su familia.Se desvivió por su mujer y sus hijos. Irse a Kabul fue una decisión muy difícil pero tenía un gran sentido del deber con España y sabía que así tamibén daba a sus hijos un futuro mejor.Lo pasaba mal ahí porque echaba de menos a la familiapero hablaban todas las semanas por teléfono o por Skype. Cuando venía a España siempre haciamos por vernos y jugar un partido de fútbol con los compañeros".

Afganistán es para muchos la misión más dura y difícilde todas en las que han participado las fuerzas de seguridad españolas , no sólo por la logística, sino también por la peligrosidad que su desarrollo entrañaba.

Aún asi, el gobierno español ha vuelto a demostrar su tropeza en comunicación y gestión de la información. El viernes por la tarde, cuando todavía no había sido neutralizado el ataque, el presidente de gobierno Mariano Rajoy se apresuró en informar de que el ataque talibán no había sido contra la emabajada sino contra una casa de huéspedes. En la primer declaración del presidente, Rajoy señaló que un agente español había sido evacuado con heridas de gravedad. Sin embargo, horas después y durante un mitín en Orihuela, el presidente anunció la muerte del policía Isidro Gabriel de Santamaría. La noticia de la muerte del subinpector la conocimos el sábado por la mañana, jornada en la que el gobierno rectificó y anunció, a través de un comunicado, que el ataque talibán perpetrado enAfganistánen el barrio diplomático de la capitalKabul, en el que han muerto al menos cuatro policías afganos y dos españoles, es "un ataque contraEspaña".

Una información que llega tarde y mal porque España ha participado desde 2002 de las operaciones que la OTAN ha desarrollado en suelo afgano en aras de estabilizar Afganistán. Durante los 13 años de presencia de España en Afganistán, un total de 102 efectivos han fallecido en suelo afgano por lo que negar la muerte de los dos españoles es negar que la peligrosidad y la posibilidad de un ataque que los agentes están dispuestos a aceptar cuando deciden viajar a Afganistán para servir a España y conseguir un poco dinero extra para que sus familias vivan mejor.

Mostrar comentarios