Los estonios votan activamente en las primeras elecciones desde la entrada en el euro

Moscú.- Los estonios votan hoy activamente en las primeras elecciones parlamentarias desde la entrada en el euro con el conservador Partido de las Reformas (PR) del primer ministro, Andrus Ansip, como claro favorito para la victoria.

"Hay que acudir a las urnas. Es nuestro derecho constitucional. Así expresamos nuestro estado de ánimo y elegimos qué futuro queremos para nuestro país", aseguró el presidente estonio, Toomas Ilves, tras depositar su voto.

Según la Comisión Electoral Central (CEC), 342.900 estonios han emitido ya su voto (37,6 % del electorado) tras tres horas de votación, un 5,3 % más que en los anteriores comicios legislativos.

Aunque hay que tener en cuenta que esa cifra incluye a los 249.800 que votaron por adelantado, entre ellos más de 140.000 por internet, práctica en la que la república báltica es pionera y que le ha valido el popular sobrenombre de E-stonia.

La legislación electoral no contempla un mínimo necesario de participación electoral para considerar válidos los comicios, aunque los pronósticos apuntan a que votará más del 60 % de los estonios con derecho a sufragio (963.000).

Los colegios electorales abrieron sus puertas a las 09.00 hora local (07.00 GMT) y cerrarán a las 20.00 hora local (18.00 GMT), y los primeros resultados oficiales se conocerán en la madrugada del lunes.

Según las encuestas, la formación conservadora de Ansip es respaldada por más del 30 % del electorado, en una demostración de su respaldo a la política de austeridad introducida por el jefe del Ejecutivo.

Ansip, en el poder desde 2005, ha superado con nota la crisis económica que sacudió con virulencia las economías de los tres países bálticos y que le obligó a tomar decisiones muy poco populares como el recorte de los gastos sociales.

Los estonios valoran que Ansip, de 54 años, el único jefe de Gobierno local que ha agotado su mandato en 20 años de democracia, lograra cumplir con los requisitos exigidos por la UE para poder renunciar a la corona estonia y adoptar el euro el pasado uno de enero.

"Hemos atravesado tiempos difíciles. Tomamos decisiones dolorosas, como el recorte de salarios, para equilibrar el presupuesto. La gente aprecia ahora el coraje del Gobierno", afirmó a Efe Silver Meikar, diputado del PR.

El diputado aseguró que la impresión que ha calado en el electorado es que "Ansip salvó la economía, colocó a Estonia en la zona euro y ahora hay de nuevo dinero para ayudar a la gente".

En los últimos meses la economía estonia, que se contrajo hasta casi un 20 % durante la crisis, es la segunda que más ha crecido en la UE tras Suecia, mientras el paro se ha reducido hasta el 14,3 %.

El segundo partido en intención de voto es la formación de centroizquierda Partido del Centro (PC) del alcalde de Tallin, Edgar Savisaar, con el 22 %, en gran medida gracias al apoyo de la minoría rusa.

No obstante, Savisaar se ha visto salpicado por un escándalo debido a las denuncias de que su partido fue financiado con dinero procedente de Rusia, con la que Estonia mantiene una tensa relación.

Al parecer, el presidente del consorcio Ferrocarriles de Rusia, Vladímir Yakunin, habría entregado 2 millones de dólares para la campaña del PC.

Mientras, el partido de centroderecha Respublica del ex primer ministro Mart Laar, que integra la coalición gobernante junto al PR, cuenta con el 20 % de intención de voto, y los socialdemócratas, un 13 %.

De acuerdo con los sondeos, la coalición de gobierno encabezada por Ansip sumaría 57 escaños, cuando la mayoría en el Riigikogu, el Parlamento unicameral estonio (101 asientos), son 51.

En caso de no lograr la mayoría, el PR recurrirá probablemente a los socialdemócratas, con los que ya formó coalición de Gobierno en 2007, aunque le dejaron en la estacada dos años más tarde por desavenencias políticas.

Como es ya tradición, las elecciones están marcadas por la controversia de que un 10 % de la población en edad de votar no puede hacerlo, ya que se trata de personas, rusos en su mayoría, sin pasaporte.

Son los conocidos como "no ciudadanos", personas que incluyen también a los eslavos nacidos en Estonia, pero que no reciben automáticamente la ciudadanía, ya que deben superar un examen sobre la lengua estonia y la Constitución nacional.

"La minoría rusa está discriminada. Los estonios ganan un tercio más y el paro es tres veces mayor entre los rusos. Estonia es un GULAG espiritual para los eslavos", aseguró a Efe Dmitri Klenski, político y periodista ruso.

Klenski considera inadmisible que la UE permita la existencia en su seno de un sistema segregacionista, en el que "los rusos son ciudadanos de segunda clase".

"Los rusos callan. Tienen miedo a perder su puesto de trabajo. Y, mientras, Rusia ha renunciado a defender a sus compatriotas en el espacio postsoviético", aseveró.