Los polacos de las zonas inundadas acuden a votar en vehículos anfibios

Varsovia.- Los residentes de algunas comarcas polacas afectadas por las riadas acudieron hoy a votar en vehículos anfibios y, aunque muchos han perdido sus casas en las inundaciones, no quisieron perder la oportunidad de ejercer su derecho al voto en unas elecciones de las que saldrá el futuro presidente de Polonia.

"Mi granja se ha hecho pedazos, pero a pesar de eso voy a votar", explicó una vecina del municipio de Wilki, en el sureste del país, una de las regiones más afectadas por el desbordamiento del río Vístula durante las pasadas semanas.

Mientras los campos de cultivo permanecen anegados y los lugareños se emplean a fondo en combatir las plagas de mosquitos y recuperar lo poco que les queda, algunos habitantes de estas comarcas preferían olvidar su tragedia y depositar su papeleta, aunque fuese a bordo de un vehículo anfibio del Ejército, ya que varias carreteras han desaparecido bajo las aguas.

Las inundaciones, las peores en 160 años, han causado en las últimas semanas al menos 24 muertos y elevadas pérdidas materiales.

La voluntad de estos vecinos es excepcional en medio de un panorama general de desinterés por los comicios y baja participación, ya que a las 13.00 hora local (11.00 GMT) había votado menos del 24 por ciento de los polacos, según informó la Comisión Electoral.

Y es que la abstención es la protagonista en la mayoría de los cerca de 26.000 colegios durante estas elecciones anticipadas tras la muerte en accidente aéreo del anterior presidente, Lech Kaczynski.

Diez candidatos concurren a estos comicios, aunque sólo dos cuentan con posibilidades de hacerse con la victoria: el liberal Bronislaw Komorowski, quien ya ejerce en la práctica como jefe de Estado en funciones, y el conservador Jaroslaw Kaczynski, hermano gemelo del fallecido presidente.

El primer ministro de Polonia, el también liberal Donald Tusk, votó esta mañana en Sopot (norte del país), donde animó a sus conciudadanos a acudir a las urnas.

"Estas elecciones presidenciales son muy importantes políticamente, porque decidirán si nos estancamos de nuevo en un conflicto espantoso, o si iniciamos un camino hacia el futuro", dijo en referencia a la más que difícil cohabitación que existirá si el vencedor hoy es Jaroslaw Kaczynski.

Aunque los candidatos liberal y conservador son ambos católicos practicantes, defensores de los valores familiares y tradicionales, otros muchos factores les alejan políticamente.

El hermano gemelo del anterior presidente, Jaroslaw Kaczynski, ha basado su campaña en llamadas a la solidaridad ante los desastres nacionales y en un mensaje nacionalista ante la UE, mientras que Komorowski ha defendido el diálogo, la plena integración en Europa y la moderación.

"Aunque no me parece el candidato idóneo espero que gane Komorowski, porque recuerdo el periodo en el que Jaroslaw Kaczynski fue primer ministro (2006-2007) y no quiero que se repita otra etapa así de turbulenta", explicó a Efe Krzystof Budzynski, empleado público jubilado.

El ganador según todos los sondeos será el liberal Bronislaw Komorowski, quien votó a media mañana en Varsovia, mientras que su principal rival, Kaczynski, fue más madrugador y prefirió depositar su papeleta antes de asistir a misa.

Unos 30,6 millones de polacos están llamados hoy a votar, para lo cual se han habilitado cerca de 26.000 locales electorales, de ellos más de 6.000 adaptados para minusválidos y 730 en hospitales, que permanecerán abiertos hasta las 20:00 horas (18:00 GMT).

Si ninguno de los candidatos logra hoy superar el 50 por ciento de apoyos, será necesario acudir a una segunda vuelta, que se celebraría el 4 de julio, y en la que se medirían los dos aspirantes más votados en esta jornada.