Madrid. Detenidas "in fraganti" 23 personas cuando robaban cobre en una antigua subestación eléctrica de usera


Agentes de Policía Nacional han detenido "in fraganti" a 23 personas cuando arrancaban el cable de cobre de una antigua subestación eléctrica situada en un solar del distrito madrileño de Usera.

Según informa la Jefatura Superior de Policía de Madrid, se les acusa de un delito de robo con fuerza, uno de daños y otro de atentado a la autoridad.
Los agentes tuvieron conocimiento de que en un solar de la calle Antonio López de Madrid había varios individuos que podrían estar sustrayendo cobre.
Una vez en el lugar, los policías pudieron comprobar cómo numerosos individuos se encontraban excavando con herramientas de obra para sustraer el cableado. Asimismo, vieron que unos pocos metros más lejos había otros individuos haciendo varias hogueras de las que emanaba humo negro.
Ante tal situación, los agentes solicitaron el apoyo de varias dotaciones policiales que se desplegaron por las inmediaciones con el fin de evitar que los ladrones pudieran llevarse el material.
Una vez comprobados los hechos, cubrieron las diferentes vías de escape con las que contaban los presuntos delincuentes, si bien éstos, al percatarse de la presencia policial, emprendieron la huida por las calles adyacentes. A pesar de ello, los agentes lograron la detención "in fraganti" de 23 personas, de nacionalidad rumana y edades comprendidas entre los 21 y los 53 años. Durante la persecución, uno de los policías sorprendió a seis de los ahora arrestados cuando pretendían introducir el cable robado en una furgoneta.
Al verse sorprendidos, uno de ellos no dudó en arremeter contra el agente, que fue auxiliado por su compañero, logrando finalmente la detención de todos ellos.
Tras los arrestos, los policías averiguaron que estos individuos habían accedido al solar tras forzar una puerta de acceso de vehículos, para lo que emplearon numerosas herramientas.
También pudieron comprobar que los ahora detenidos estaban perfectamente organizados, ya que mientras unos extraían los cables soterrados a más de un metro, los otros los cortaban con radiales para trasladarlos hasta el lugar donde sus compinches hacían hogueras en las que posteriormente "limpiaban" el cobre.
En el momento de la detención, los agentes intervinieron más de 200 kilogramos de cable de cobre, varias tapas de alcantarillas, numerosas herramientas de construcción y facturas de venta de cobre.

Mostrar comentarios