Riad, 5 ene.- El ministro saudí de Exteriores, Saud al Faisal, advirtió hoy, en una rueda de prensa en Riad, de que la crisis en Irak no se solucionará hasta que sea abordada fuera del sectarismo religioso.
"La situación en Irak no se estabilizará hasta que se trate fuera del marco sectario", afirmó Al Faisal, quien señaló que su país no intervendrá en esta crisis a menos que las autoridades iraquíes se lo pidan.
El presidente del Parlamento iraquí, Osama al Nuyaifi, ha convocado para mañana una sesión urgente de la asamblea para tratar la crisis política que atraviesa el país, escenario en las últimas dos semanas de protestas de suníes.
Durante la jornada de ayer, decenas de miles de suníes se manifestaron en las provincias de Al Anbar (oeste), Salahedín (centro), Kirkuk (norte) y Nínive (norte) para denunciar la discriminación que creen que sufren por parte del Gobierno de Al Maliki.
Los manifestantes solicitan, entre otros, la liberación de los detenidos sin cargos, la anulación de las sentencias de muerte y la derogación de la ley antiterrorista, que consideran que es utilizada especialmente contra ellos por las autoridades.
Las protestas estallaron en Al Anbar y se extendieron a otras regiones, tras la detención el pasado 20 de diciembre de varios guardaespaldas del ministro de Finanzas, Rafea al Isaui, integrante de Al Iraqiya, de tendencia laica e integrada por líderes suníes y chiíes.
El líder de Al Iraqiya, el ex primer ministro Ayad Alaui, instó anoche en un discurso televisado a Al Maliki a que dimita y que se celebren comicios legislativos anticipados.
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