Rabat, 18 feb.- Los ministros de Exteriores los países del Magreb (Marruecos, Argelia, Túnez, Libia y Mauritania) se reunieron hoy en Rabat, un primer gesto de desbloqueo de la Unión del Magreb Árabe, "congelada" desde el año 1994.
En medio de llamadas a una "voluntad política compartida" de construcción regional, los ministros subrayaron también "el nuevo clima" creado en el mundo árabe en general, y en el norte de África en particular, con las revoluciones de Túnez y Libia, más las reformas introducidas en los otros países.
Los ministros participantes en la apertura, en presencia de periodistas, no hicieron la menor alusión a los dos grandes problemas que impiden la consolidación magrebí: el cierre de fronteras entre Argelia y Marruecos desde 1994 y el apoyo argelino a los independentistas saharauis del Frente Polisario.
Todos ellos, interpelados por los reporteros, insistieron en que este relanzamiento del Magreb pasa por "aparcar" estos dos problemas y avanzar en los ámbitos en que se puede conseguir una mayor integración, y particularmente el económico, teniendo en cuenta que el comercio intermagrebí alcanza escasamente un 3 % del PIB regional.
El jefe de la diplomacia argelina, Murad Medelci, quiso añadir un nuevo aspecto para llenar de contenido esta cumbre, el de la seguridad, insistiendo en las amenazas "del crimen organizado y el terrorismo" que afectan a toda la región e invitando a sus pares a un encuentro en Argel consagrado exclusivamente a este tema.
Se espera que los ministros, en una reunión posterior a puerta cerrada al final de la mañana, fijen la fecha para una próxima cumbre de presidentes de los cinco países, que según varias fuentes se celebrará en la capital tunecina en torno al mes de octubre.
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