Paraguay cuestiona su regreso al Mercosur si Venezuela asume la Presidencia

Santi Carneri

Asunción, 5 jul.- Paraguay, que en la cumbre del Mercosur del próximo día 12 en Montevideo puede ser invitado a regresar al bloque, ha puesto en duda su reincorporación al condicionarla a que Venezuela no asuma la Presidencia temporal.

El presidente electo paraguayo, Horacio Cartes, que asumirá su cargo el 15 de agosto, ha exigido que la Presidencia sea otorgada a Paraguay en respeto a la "dignidad" del país, suspendido del bloque regional el 29 de junio de 2012 en castigo por la destitución del entonces presidente, Fernando Lugo.

"Nosotros, como un gesto de buena voluntad, pedimos la Presidencia pro témpore que nos hubiera correspondido. Si hay predisposición, adelante, o si no, nada tenemos que hacer", dijo Cartes el pasado martes, reiterando la postura que anunció en Madrid durante su visita del 24 de junio pasado.

Cartes, que tras ganar en las urnas en abril dio impresión de que optaría por una postura más pragmática, pidió un gesto de los vecinos para que el nuevo Parlamento y la ciudadanía paraguaya asuman el ingreso de Venezuela en el bloque, aprobado el mismo día en que se suspendió a Paraguay.

Días después sugirió que en la Cumbre de Montevideo, "se haga un cuarto intermedio hasta el 15 de agosto", cuando él asume el cargo, y después se le otorgue a Paraguay la Presidencia semestral.

"También quedamos abiertos, de que si hubiera alguna otra idea en donde se respete el Estado de Derecho del Paraguay, y del propio Mercosur, estamos abiertos a escuchar cualquier sugerencia", dijo.

La posición de Cartes "me parece irreprochable (...) merece mi respeto y por supuesto mi aprobación", comentó el jueves el presidente saliente, Federico Franco.

Paraguay fue suspendido del Mercosur en la cumbre de Mendoza (Argentina) del 29 de junio de 2012, una semana después de la destitución en un juicio político del presidente Fernando Lugo, cuyo mandato completa el que fue su vicepresidente, Franco.

"Me parece correcto que el Paraguay reivindique y mantenga su posición de que el ingreso de Venezuela ha sido el verdadero golpe del Mercosur contra el Paraguay", observó Franco.

El Senado paraguayo había bloqueado durante años la incorporación de Venezuela.

Durante la crisis abierta con el juicio político en el Senado y la destitución de Lugo, Nicolás Maduro, entonces canciller y que encabezó una misión de ministros de Unasur a Asunción para terciar, fue declarado "persona non grata" por el Ejecutivo de Franco, que lo acusó de "injerencia" por supuestos contactos con militares.

Después, ambos países expulsaron a sus embajadores y a casi todo el cuerpo diplomático y sus relaciones siguen bajo mínimos.

Un año más tarde se da la paradoja de que Nicolás Maduro, ahora presidente de Venezuela, es quien tiene que asumir la presidencia pro témpore de Mercosur en la cumbre del retorno de Paraguay.

Para el presidente de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), Eduardo Felippo, Cartes obra bien ya que "la dignidad es mucho más importante que los negocios".

Felippo propuso el pasado domingo, en una entrevista con el rotativo ABC Color, que Venezuela se retire del Mercosur, que Paraguay se reincorpore y asuma la Presidencia y "paralelamente", el Legislativo paraguayo apruebe el ingreso de Venezuela "cumpliéndose al pie de la letra el Tratado del Mercosur".

"Tenemos que hacer que se corrija el error cometido, cuando se suspendió al Paraguay transgrediendo las reglas del Mercosur; y esa (corrección) es una cuestión semántica nada más", añadió el representante de una de las principales cámaras paraguayas.

El empresario dijo que los países vecinos, Argentina, Brasil y Uruguay "pierden" mientras Paraguay siga fuera del bloque.

"Tendrán que cuidarnos más. Esto es un problema de posición ideológica que no tiene ningún sentido", declaró Felippo a periodistas el martes, justo antes de reunirse con Cartes en su residencia privada.

El analista Alfredo Boccia observó a Efe que "hubo un viraje" en la opinión de Cartes sobre el Mercosur.

"Durante y después de la campaña tenía un tono más pragmático, quería volver al Mercosur lo antes posible, decía que era imposible pensar que Paraguay quedara fuera, pero con el paso de las semanas fue cargando las tintas sobre la dignidad de Paraguay, lo que lleva a un empantanamiento".

Ese cambio de postura responde a "una cuestión interna para no dar la imagen de debilidad" y a que "está asesorado por la vieja guardia de cancilleres de la época de la dictadura de (Alfredo) Stroessner" (1954-89), opinó Boccia.

"Esto hace complicado todo tipo de negociaciones, es imposible a largo plazo que Paraguay le dé la espalda a tantos países de la región. Paraguay necesita de Brasil y Argentina como del oxígeno", advirtió.