Periodistas secuestrados en Siria estaban vivos hace un mes, según testigos

  • El periodista Javier Espinosa, enviado especial de El Mundo a Siria, y el fotógrafo Ricardo García, secuestrados en aquel país desde el 16 de septiembre, estaban vivos hace un mes, según algunos testigos, pero se desconoce si los captores, que no han pedido ningún rescate, les retienen juntos.

Madrid, 10 dic.- El periodista Javier Espinosa, enviado especial de El Mundo a Siria, y el fotógrafo Ricardo García, secuestrados en aquel país desde el 16 de septiembre, estaban vivos hace un mes, según algunos testigos, pero se desconoce si los captores, que no han pedido ningún rescate, les retienen juntos.

Estos son los principales datos dados a conocer hoy, en una multitudinaria rueda de prensa, por el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, y Gervasio Sánchez, periodista especializado en conflictos bélicos que está ejerciendo de portavoz de las familias de los secuestrados por el grupo Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS).

Ramírez y Sánchez, junto con la presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Elsa González, han hecho un llamamiento a los secuestradores para que pongan en libertad a los dos periodistas, así como a Marc Marginedas, enviado especial de El Periódico y también secuestrado en Siria.

A esta petición se ha unido, a través de un vídeo desde Beirut, la de la compañera de Javier Espinosa, la periodista Mónica G. Prieto, quien ha recordado que cuando pidió a su pareja que dejara Siria porque los dos hijos que tienen le "necesitaban vivo", él respondió que "los niños sirios necesitaban la atención del mundo".

El último contacto con el periódico de Espinosa fue horas antes del secuestro, entre el día 15 y 16 de septiembre, ha recordado el director de El Mundo, que ha destacado que aunque en la actualidad "no hay pruebas de vida", hace un mes "estaban vivos y bien".

Ramírez y Sánchez han reconocido que ha habido "contactos" con los secuestradores pero que estos no han realizado ninguna "demanda concreta" y que, ante esa "falta de deseo de interlocución" y de saberse que los retenidos están "bajo investigación", de acuerdo con el deseo de las familias ayer, a las 12.00 horas, se levantó el "embargo informativo" sobre la noticia del secuestro.

Fue en el punto de control de Tal Abyad, situado en la provincia de Raqqa, y a pocos kilómetros de Turquía, donde los periodistas fueron secuestrados junto con cuatro combatientes de Ahfad al Mountapha, que les ofrecían protección, y que fueron liberados doce días después.

Pedro J. Ramírez ha destacado la trayectoria profesional de Javier -"es parte del ADN de El Mundo"-, Ricardo y Marc, señalando que representan "la cara más digna, idealista y más noble de la profesión periodística".

"Forman parte de ese grupo de periodistas que se desplazan a lugares de máximo riesgo para satisfacer el derecho a la información de los demás y para acercarse al dolor de los demás", ha subrayado.

Por su parte, Sánchez ha dicho que es "un gran honor" para él haber sido escogido por las familias como portavoz "de su dolor" y ha apuntado que "admira profundamente" a los tres secuestrados.

"Siempre han huido del protagonismo" y cuando sean liberados se enfadarán "bastante con todos nosotros" por haber hecho esta rueda de prensa, según Sánchez, que ha subrayado que "Siria es posiblemente la crisis más difícil a la que nos hemos enfrentado los periodistas".

"Los secuestros son lo peor que le puede pasar a un periodista, quitando la muerte", ha enfatizado Sánchez, que ha informado de que desde 2011 ha habido en Siria 121 periodistas asesinados, 62 secuestrados y, solo en este año, 72 encarcelados o desaparecidos y 8 extranjeros han sido asesinados.

Por otra parte, Ramírez ha dicho que "da por supuesto" que el Gobierno está haciendo "lo que está en su mano" para liberarles.

Elsa González ha recordado que el periodista no debe ser noticia porque cuando sucede suele ser "una mala señal", y ha comentado que Espinosa, último Premio internacional de periodismo "Manu Leguineche" que otorga la FAPE, al recogerlo comentó que "el periodismo es ir al lugar del conflicto para contarlo y que las historias no se cuentan en 140 caracteres". EFE

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