Piden cárcel para Muñoz, Roca y exediles del GIL por otorgar una licencia

Málaga, 15 sep.- El exalcalde de Marbella Julián Muñoz se enfrenta a otra pena de cárcel solicitada por la Fiscalía de Málaga por un nuevo delito contra la ordenación del territorio, en este caso por otorgar licencia de obras para la construcción del Hotel Guadalpín Banús en la urbanización Fuentes del Rodeo.

Muñoz se enfrenta a un año de prisión e inhabilitación especial para empleo o cargo público durante diez años, según el escrito acusatorio, al que ha tenido acceso Efe.

En el banquillo de los acusados también se sentarán la exalcaldesa Marisol Yagüe y la que fuera durante años azote del fallecido Jesús Gil, Isabel García Marcos, acusadas por el mismo delito.

También están procesados otros exediles del Gil, entre ellos, el exteniente de alcalde, Pedro Tomás Reñones, y el fugado de la Justicia, Carlos Fernández, declarado en rebeldía desde julio de 2006.

Pese a que la fiscalía malagueña no acusa al presunto cerebro de la trama de corrupción del "caso Malaya", Juan Antonio Roca, las otras dos acusaciones personadas en el procedimiento si lo acusan de haber participado en dichos actos ilícitos y piden que sea condenado a dos años de cárcel y diez de inhabilitación por un delito contra la ordenación del territorio.

Según las acusaciones, los acusados en noviembre de 2002 y febrero y julio de 2004 acordaron o cooperaron en la generación del acuerdo y se basaron en la revisión municipal en tramitación del PGOU para otorgar licencia para la construcción del Hotel Guadalpín Banús.

Los procesados están acusados de contravenir, a sabiendas, el ordenamiento jurídico, al resultar incompatible con la legislación urbanística del suelo.

Al concederse la licencia dio lugar "a una infracción palmaria de la normativa urbanística", según el escrito acusatorio.

Actualmente continúan en prisión por diversos procedimientos penales Juan Antonio Roca y Julián Muñoz, ambos acusados en la mayor trama de corrupción en España, que tuvo como consecuencia una medida inédita en la historia democrática: la disolución del Ayuntamiento de Marbella en abril del 2006 y la constitución de una comisión gestora hasta las elecciones del 2007.