Piden que un dominicano ocupe la vacante dejada por legislador en Puerto Rico

  • El Movimiento de Integración Dominicana pide al gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, que seleccione a un miembro de esa nacionalidad para ocupar la vacante dejada en la Cámara de Representantes por Eduardo Ferrer.

San Juan, 5 jul.- El Movimiento de Integración Dominicana pide al gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, que seleccione a un miembro de esa nacionalidad para ocupar la vacante dejada en la Cámara de Representantes por Eduardo Ferrer.

El presidente de esa organización, Rolando Acosta, señaló hoy a Efe que la dimisión de Ferrer abre una oportunidad para que un dominicano acceda a un puesto con el que se daría representatividad a la comunidad de ese país, que tiene un gran peso en Puerto Rico.

"Necesitamos presencia en puestos de decisión", dijo Acosta, que recordó que los dominicanos constituyen el 9,1 % del censo electoral de San Juan y el 3,4 % del conjunto de Puerto Rico.

Dijo que por esa razón es importante que el escaño dejado vacante en la Cámara de Representantes por la renuncia de Ferrer sea ocupado por un dominicano.

Acosta, excónsul de su país en San Juan, destacó que es momento de reconocer la aportación que han hecho los dominicanos al desarrollo social y económico de Puerto Rico.

Por ello, pidió que a los dominicanos residentes en Puerto Rico se les brinden las mismas oportunidades que ofrece el Partido Demócrata a los hispanos en Estados Unidos, donde son tomados en cuenta en el ámbito Ejecutivo, Legislativo y Judicial, incluidas las alcaldías y todo el aparato del Gobierno, a nivel federal y estatal.

Aseguró que si el gobernante Partido Popular Democrático (PPD) escoge a un dominicano para ocupar la vacante dejada por el representante Ferrer va a tener el respaldo de la mayoría de la comunidad de ese país, lo que, en su opinión, garantizaría a esa formación política ganar las próximas elecciones generales.

El actual sistema electoral puertorriqueño -dijo- no permite la representatividad de las minorías, a diferencia de Estados Unidos, donde está concebido para que éstas sean visibles en los órganos de poder.

Además, destacó que en Estados Unidos hay dominicanos presentes en todos los ámbitos públicos del país, razón que justifica que en Puerto Rico se siga el mismo camino.

Según el censo estadounidense de 2010, en Puerto Rico viven 3,7 millones de personas, de las que 68.000 son dominicanos con ciudadanía estadounidense.

No hay datos de dominicanos indocumentados en Puerto Rico, pero de forma extraoficial se calcula que la cifra pueda alcanzar los 200.000, aunque otras estimaciones elevan a casi el doble el número de personas de esa nacionalidad.

La comunidad dominicana en Puerto Rico tomó protagonismo a finales del pasado junio tras la ratificación por parte del Senado del proyecto de ley para la concesión de licencias de conducir a extranjeros sin permiso de residencia.

Acosta explicó entonces que la medida, de la que según sus estimaciones se beneficiarán al menos 100.000 dominicanos, permitirá salir del anonimato en que se encuentran esos miles de dominicanos que carecen de cualquier tipo de identificación y que a partir de ahora podrán abrir cuentas de banco, ser contratados y pagar contribuciones sobre ingresos.

El representante por acumulación Eduardo Ferrer renunció el pasado día 1 de julio a su escaño en la Cámara de Representantes, aunque no especificó los motivos.

La prensa local apuntó que la principal causa fue la reciente reforma legislativa que ha afectado a las condiciones salariales de los miembros de Cámara de Representantes y Senado, ante la que Ferrer decidió seguir su carrera como abogado.

Mostrar comentarios