Pons: PP acepta la protesta como forma de diálogo, pero nunca con violencia

Madrid, 8 abr.- El vicesecretario general de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, ha asegurado hoy que su partido acepta que la protesta sea "una forma de diálogo", pero lo que reclama es que "nunca traspase el límite de la violencia".

Pons, en cuyo domicilio de Valencia un grupo de personas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca protagonizó un escrache hace unos días, ha insistido en que su partido es consciente de que la gente está "sufriendo mucho", pero "la causa más digna se ve perjudicada si es defendida con violencia".

Como ejemplo de dicha violencia ha citado el caso de un asesor de Compromís, que según ha asegurado "luce una camiseta en la que sale él mismo azotando con un látigo a la alcaldesa de Valencia", Rita Barberá.

Se trata, en su opinión, de "violencia efectiva", porque supone una representación en la que se pega a un político y además "sexista" por tratarse de una mujer.

Ha señalado que "ahí es donde la protesta traspasa el último límite y se convierte en violencia" que deben condenar todos los partidos, y ha pedido la dimisión de este asesor que "vive con dinero público" y que se pone camisetas "pegando a una mujer", que en este caso, además, es la alcaldesa de Valencia.

El vicesecretario general de Estudios y Programas admite haber "sufrido personalmente muchas protestas, algunas nada agradables y bastante crispadas", aunque entiende que un político deba aceptarlo.

Sin embargo, en el caso del escrache en su casa de Valencia, considera "incomprensible" que fueran a protestar "un día que sabían de antemano" que él estaba en Madrid, cuando quienes ocupaban la vivienda, su familia, no tienen "nada que ver" con su quehacer político.

A preguntas de los periodistas, Pons ha señalado que hasta donde él sabe, no está prevista una reforma legal para garantizar a los políticos una mayor protección.