Portugal permite volver a Brasil al autor de un asalto con rehenes en 2008

  • La Justicia portuguesa aprobó el regreso a Brasil de uno de los dos responsables de un asalto con rehenes en un banco cometido en Lisboa en 2008, y que concluyó con la muerte de su compañero en el intento de robo por los disparos de la policía.

Lisboa, 6 ago.- La Justicia portuguesa aprobó el regreso a Brasil de uno de los dos responsables de un asalto con rehenes en un banco cometido en Lisboa en 2008, y que concluyó con la muerte de su compañero en el intento de robo por los disparos de la policía.

Según los medios lusos, Wellingron Nazaré cumplió cinco de los ocho años y medio de prisión a los que fue condenado por este suceso, uno de los más espectaculares y mediáticos ocurridos en Portugal en los últimos años.

El "proceso de expulsión" de Nazaré le permitió abandonar hoy las instalaciones carcelarias de la ciudad de Coimbra y ser trasladado al aeropuerto de Lisboa, desde donde viajará hasta su país natal.

El mismo tribunal que decidió la pena por su participación en el asalto le prohíbe la entrada en Portugal durante los próximos ocho años, según informó el abogado de la defensa, que adelantó que en Brasil podrá vivir en libertad condicional.

El caso por el que Nazaré fue detenido y condenado se remonta a agosto de 2008, cuando junto a otro hombre de origen brasileño asaltó una oficina del Banco Espírito Santo (BES) en la capital portuguesa.

Durante cerca de ocho horas los dos ladrones mantuvieron a varios rehenes en su poder para negociar su huida con las autoridades policiales.

El desarrollo del suceso fue retransmitido en directo por la televisión, que incluso mostró imágenes de cómo los asaltantes apuntaban con sus pistolas a la cabeza de las personas a las que mantenían secuestradas.

Sin embargo, el intento de robo acabó de forma violenta y los agentes liberaron a los rehenes tras disparar sobre los dos individuos.

Nilton de Souza falleció en el acto a causa de los disparos mientras que Nazaré resultó herido de gravedad, aunque acabó recuperándose en el hospital y fue condenado por la Justicia lusa un año después, en 2009.

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