PP y PSOE se culpan mutuamente del fracaso en la negociación del Estatuto

Madrid.- El PP y el PSOE se han culpado hoy mutuamente del fracaso en la negociación de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha en el Congreso, pese a que dirigentes de ambos partidos aseguran haber hecho grandes esfuerzos en favor de un acuerdo durante los 24 meses que el proyecto lleva en la Cámara.

Concluida la reunión de la Comisión Constitucional, que ha aprobado el dictamen sobre esta reforma con el voto en contra del PP, ha comparecido ante la prensa el "número dos" del grupo socialista, Eduardo Madina.

Según su versión de lo ocurrido, la presidenta del PP en Castilla-La Mancha, Dolores de Cospedal, y su propio partido, han "matado" hoy el nuevo Estatuto de Castilla-La Mancha.

A renglón seguido lo ha hecho la propia Cospedal, en su caso para culpar al presidente de su comunidad autónoma, José María Barreda, de que el intercambio de enmiendas sobre la política hídrica no haya culminado satisfactoriamente, y ello pese a que la última planteada hoy mismo al PSOE era una "gran propuesta" plenamente satisfactoria.

La también secretaria general del PP ha tenido que responder a insistentes preguntas sobre el papel desempeñado en el desenlace de la negociación por los presidentes de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, y el de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, quien hoy ha estado en el Congreso para deliberar sobre la decisión del PP.

Dolores de Cospedal ha reiterado varias veces que la propuesta de su partido era "de todo el PP", y respecto a la presencia de Valcárcel en la Cámara Baja, ha remarcado que quien no se ha preocupado por negociar en el Congreso el Estatuto ha sido José María Barreda.

Previamente, el socialista Madina había enfatizado los "esfuerzos" del PSOE por aproximarse a las posiciones del PP de los dos últimos dos años.

A su entender era una "propuesta más que razonable" la oferta de los socialistas de fijar en 4.000 hectómetros cúbicos la reserva hídrica de las cuencas castellano-manchegas, rechazada por el PP.

Convencido de que ahora las Cortes de Castilla-La Mancha retirarán el proyecto, ha emplazado a Cospedal a explicar ante los ciudadanos de esta autonomía por qué no tendrán nuevo Estatuto.

Sin embargo, Dolores de Cospedal ha personalizado luego en Barreda toda la responsabilidad por lo sucedido, ha revelado que hoy le había enviado un fax con la oferta final del PP, sin obtener respuesta, y ha achacado su actitud a intereses "partidistas y personales".

En este sentido, le ha atribuido el "triste mérito" de ser el único presidente autonómico que no ha logrado sacar adelante la reforma estatutaria de su comunidad tras haber "torpedeado" el consenso; de hecho, ha afirmado sin mencionar nombres que otros socialistas sí estaban de acuerdo con la enmienda del PP.

"Sacar ventaja política" ha sido otra acusación que ha lanzado contra Barreda para explicar su actitud, si bien ha advertido de que este presidente se equivoca si piensa que su papel le va a beneficiar, sobre todo cuando echa la culpa al Partido Popular.

José María Barreda es, a su juicio, el único presidente que ha sido "incapaz" de aprobar un estatuto pese a la "mano tendida" del PP, y ello porque "ha preferido la ventaja personal al interés general", según sus palabras.

Además de proclamar que la oferta puesta hoy sobre la Mesa es "del PP de toda España", respuesta que ha reiterado cuando los periodistas le han instado a confirmar que la apoyaban Camps y Valcárcel, ha asegurado que su partido tiene "un solo discurso" en materia de política hídrica en todo el territorio nacional.