Ginebra, 27 ene.- La relatora especial de Naciones Unidas para el derecho a la vivienda digna, Raquel Rolnik, reclamó hoy al gobierno brasileño una "solución apropiada", incluyendo nuevos apartamentos, para las personas que esta semana fueron desahuciadas del barrio de chabolas Pinheirinhos, en Sao Paulo (Brasil).
"Estoy horrorizada con el excesivo y repetido uso de la fuerza durante el desahucio del 22 de enero", dijo la relatora especial en un comunicado.
Rolnik mostró su sorpresa por el hecho de que la policía militar de Sao Paulo, que realizó el desahucio, usó gases lacrimógenos y balas de goma contra los residentes de Pinheirinhos, "incluyendo niños y ancianos".
El desalojó se realizó a la fuerza por orden judicial, en una operación que se saldó con 32 detenidos, entre otros delitos, por incendiar ocho vehículos e intentar agredir a los agentes.
La favela se encuentra en la ciudad de Sao José dos Campos, en las afueras de la ciudad de Sao Paulo y albergaba a unas 6.000 personas.
"Me han dicho que Pinheirinhos está todavía bajo sitio y que a nadie se le permite entrar en el área. La situación actual de los desahuciados es extremadamente preocupante, sin ninguna otra alternativa de vivienda, son muy vulnerables a otras violaciones de los derechos humanos".
Es por ello, que la relatora especial pidió a las autoridades del estado de Sao Paulo que suspenda la orden de desahucio y la acción policial en Pinheirinhos.
"Suspender la orden de desahucio permitiría a las autoridades reanudar conversaciones con los residentes para poder encontrar una solución definitiva que cumpla con los estándares de derechos humanos", aseveró.
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