Rubalcaba sitúa la inmigración y la energía entre los nuevos desafíos de la UE

Madrid.- El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha mostrado hoy orgulloso del proceso de construcción europea en el Día de Europa, pero ha alertado de los "desafíos" a los que tiene todavía que enfrentarse la UE, desde la gestión de la inmigración hasta el abastecimiento energético.

Rubalcaba ha hecho esta reflexión en el Palacio de La Moncloa tras entregar las medallas de la Orden del Mérito Constitucional a los representantes españoles en la redacción del fallido Tratado Constitucional europeo y del Tratado de Lisboa, ahora en vigor.

"Podemos estar orgullosos, pero nunca completamente satisfechos" porque no se ha completado la tarea europea, ha advertido el vicepresidente al recordar cómo durante los últimos meses, ante las convulsiones de la crisis financiera, los veintisiete han tenido que adaptar la legislación comunitaria para dar respuesta a las necesidades de varios de los Estados miembros.

Junto a la inmigración y la energía, ha citado entre los desafíos europeos el envejecimiento de la población, el mantenimiento del Estado del bienestar y la sostenibilidad ambiental.

También ha hecho referencia al problema migratorio el eurodiputado del PP Íñigo Méndez de Vigo, que ha tomado la palabra en nombre de varios de los condecorados y ha recordado que el Tratado de Lisboa es sólo el marco para resolver los retos comunitarios: las revoluciones en el Norte de África, la inmigración y la gobernanza económica.

En un momento en que se debate la posibilidad de introducir cambios en el espacio de libre circulación de personas ante la masiva llegada de inmigrantes, Méndez de Vigo ha pedido no perder de vista los principios y los valores europeos de "la libertad, la solidaridad y los respetos a los derechos humanos".

La semana pasada la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, consideró aceptable la propuesta de la Comisión Europea de estudiar la posibilidad de reintroducir controles fronterizos por causas excepcionales, al entender que no supone una reforma del Tratado Schengen.

El que fuera desde 2002 y hasta el año pasado embajador ante la UE, Carlos Bastarreche, ha considera que España tiene peso específico para participar en el rediseño en el que está inmersa la UE, que por un lado se beneficia de importantes transferencias de responsabilidades en el ámbito económico y por otro vive "tendencias centrífugas" en algunos de sus pilares básicos.

Junto a Bastarreche y Méndez de Vigo han sido premiados con la medalla de la Orden del Mérito Constitucional Ana Palacio, Alfonso Dastis, Josep Borrell, Diego López Garrido, Alejandro Muñoz-Alonso, Carlos Carnero, Miguel Ángel Moratinos, Enrique Barón y, a título póstumo, Gabriel Cisneros.

Fue el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, antiguo compañero de varios de ellos en el Parlamento Europeo, quien les propuso para esta condecoración por su participación, como hoy ha dicho, en el proceso de configuración del marco jurídico del siglo XXI.