"Rusia continúa con su línea política consecuente para aportar asistencia y ayudar a las fuerzas armadas sirias en su ofensiva contra los terroristas", aseguró el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Los países occidentales y Turquía acusan a Moscú de atacar a la oposición siria moderada y no tanto a los yihadistas del grupo Estado Islámico.
Peskov también se pronunció sobre el fracaso del proyecto de resolución ruso en la ONU.
"Lamentamos que se haya rechazado", dijo, añadiendo que Moscú continuará con su política encaminada a "garantizar la estabilidad y la integridad territorial" de Siria.
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