Sandoval recurre ante el Supremo francés su extradición a Argentina

  • El expolicía Mario Sandoval, acusado en Argentina de crímenes contra la humanidad durante la dictadura, ha decidido recurrir ante el Tribunal Supremo la decisión de la justicia francesa, que la semana pasada dio luz verde para su extradición.

París, 3 jun.- El expolicía Mario Sandoval, acusado en Argentina de crímenes contra la humanidad durante la dictadura, ha decidido recurrir ante el Tribunal Supremo la decisión de la justicia francesa, que la semana pasada dio luz verde para su extradición.

La abogada de Sandoval, Floriane Ponsard, explicó hoy a Efe que el recurso de Sandoval se explica porque "impugnamos la extradición" y la base jurídica en que se sustenta.

El Tribunal de Apelación de París aceptó el pasado miércoles su entrega a Argentina, pero sólo para ser juzgado por la desaparición del estudiante Hernán Abriata, quien fue detenido en la casa de sus padres en Buenos Aires el 30 de octubre de 1976, y del que no se tienen noticias desde entonces.

La sala de acusación de esa instancia judicial consideró que "los elementos de implicación no eran suficientes" para justificar la extradición por los otros 601 casos por los que también reclamaba a Sandoval la justicia argentina.

El procedimiento ante el Supremo retrasará una eventual extradición, que no se materializará antes de un año, según los cálculos de la abogada que representa a Argentina en este sumario, Sophie Thonon.

Si fuera condenado en Argentina, la pena máxima que se podría imponer a Sandoval es de 15 años, que es la que estaba prevista en 1976 en el Código Penal para los delitos relacionados con el sumario del joven estudiante desaparecido Hernán Abriata.

Es decir que -según las restricciones fijadas por la justicia francesa- no se pueden dictar contra Sandoval (61 años en la actualidad) las penas que la normativa argentina prevé para el cargo de crímenes contra la humanidad.

El encausado va a seguir en libertad bajo control judicial -con la obligación de acudir regularmente a comisaría- y sólo si se tuviera una sospecha fundada de que pretende eludir a la justicia, Argentina podría pedir medidas suplementarias de seguridad para controlarlo.

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