Según el ex presidente kirguís, a Bakíev le espera un destino similar al de Ceaucescu

Moscú.- El ex jefe del Estado kirguís Askar Akáyev, apartado del poder en 2005 en la Revolución de los Tulipanes, afirmó hoy que al recién derrocado presidente Kurmanbek Bakíev le espera el mismo destino que al dictador comunista rumano Nicolae Ceaucescu.

"El propio Bakíev se ha buscado este final. Su destino será similar al del dictador rumano, porque la postura del pueblo en su contra es muy firme. Le espera un destino triste, el destino de Ceaucescu", declaró Akáyev en alusión al dictador que fue ejecutado tras represión violenta de la revolución anticomunista en Rumanía.

Akáyev se mostró convencido, además, de que ningún Estado le ofrecerá asilo político.

"Nadie le querrá, porque no fue capaz de establecer buenas relaciones con ninguno de los Estados vecinos. En primer lugar le juzgarán en el sur, en su patria en Jalal-Abad", señaló en declaraciones a la agencia rusa RIA-Nóvosti.

Agregó que el país no vivirá una guerra civil tras los disturbios que dejaron al menos 74 muertos en la capital.

"Creo que no habrá una guerra civil. El sur no apoya al (recién derrocado presidente Kurmanbek) Bakíev, no veo ningún tipo de confrontación entre norte y sur, porque en el sur los ánimos también están muy caldeados", declaró Akáyev.

El presidente Bakíev abandonó la víspera la capital y se encuentra en la ciudad sureña de Jalal-Abad, donde según la oposición trata de organizar un movimiento de resistencia.

"Tiene muchos hermanos, que también dirigían en el sur. El sur también sufrió a la familia de Bakíev. Estoy convencido de que éste es el fin del régimen de Bakíev y de que los acontecimientos son irreversibles", dijo Akáyev de su sucesor, aupado al poder tras las incruentas protestas populares de 2005.

Asimismo, se mostró convencido de que "en uno o dos días el pueblo recobrará la calma".

La líder opositora Rosa Otunbáyeva, quien encabeza el Gobierno de confianza popular en Kirguizistán tras los violentos disturbios de ayer en Biskek, aseguró hoy que el presidente derrocado, Kurmanbek Bakíev, no tiene intención de abandonar el cargo.

"El presidente trata de consolidar al electorado en el sur para continuar defendiendo su posición. Pero la oposición insiste en que abandone el poder", señaló en rueda de prensa, según informó desde Biskek la agencia rusa Interfax.

Por su parte, el gobernador de la región de Yalal-Abad, Koshbai Masírov, afirmo que el presidente derrocado tiene la intención de presentar su dimisión.

"Pero nosotros no permitiremos ofensas a nuestro hijo", declaró el gobernador, en alusión al origen de Bakíev, natural de esa zona.

Al mismo tiempo, el diario digital "Fergana.Ru" informó de que en la ciudad de Jalal-Abad se está creando un comité de defensa del derrocado presidente, al tiempo que se espera que Bakíev se pronuncie allí en un mitin sobre su dimisión.