Soraya Sáenz de Santamaría se salta su baja maternal y vuelve al trabajo

  • La portavoz del Partido Popular ha sido madre hace menos de dos semanas. Sin embargo, ha decidido renunciar a los 42 días de descanso obligatorio que establece la ley después de un parto, y al resto de su baja maternal,  para estar junto al presidente electo Mariano Rajoy como coordinadora del traspaso de poderes.
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lainformacion.com

Menos de dos semanas después de dar a luz a su primogénito, Iván, Soraya Sáenz de Santamaría está de vuelta en el trabajo. La portavoz del PP en el Congreso y fiel escudero del presidente electo Mariano Rajoy ha acelerado su recuperación tras el parto para estar en el mitin de clausura de campaña, aparecer el domingo pasado en el balcón de la victoria en Génova e iniciar hoy su agenda como coordinadora del traspaso de poderes entre su partido y el PSOE.

La ley española establece una baja maternal de 16 semanas, que se puede compartir con el padre después de pasados los 42 días posteriores al parto. Estas seis semanas de descanso tienen carácter obligatorio para la madre.

Aunque hay países europeos que solo establecen 14 semanas de permiso, como Alemania o Malta, muchos otros superan esta cifra, con Dinamarca y Reino Unido a la cabeza con 52 semanas. Y la comisión parlamentaria de Igualdad de Género y Derechos de la Mujer de la Eurocámara, al igual que diversas asociaciones que trabajan en este campo, considerafundamental ampliar el tiempo que la madre pasa con su bebé.

Sáenz de Santamaría no dará el ejemplo. Esta abogada del Estado de 40 años ya está activa y, mientras todas las quinielas la ubican al frente de algún ministerio en el nuevo gobierno o directamente en la vicepresidencia, ella se ha reunido hoy mismo con el ministro de la Presidencia en funciones, Ramón Jáuregui, para comenzar a articular el traspaso.

Su actitud ha generado un debate en torno a la conciliación entre vida laboral y familiar y los modelos que se promueven en este sentido desde las esferas públicas.

No es la primera vez que sucede algo así con una política de primer nivel. En 2008 Carme Chacón, ministra de Defensa, fue criticada por volver al trabajo poco después de tener a su hijo Mikel, aunque en su caso sí se tomó las seis semanas obligatorias y el resto hasta las 16 semanas lo completó su marido, Miguel Ángel Barroso.

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