Bogotá, 17 ago.- La Corte Suprema de Justicia de Colombia (CSJ) reiteró hoy su rechazo a que el expresidente colombiano Álvaro Uribe sea reconocido como víctima en el proceso del alto tribunal contra la exsenadora Piedad Córdoba, como ya hizo a comienzos de julio.
La CSJ informó en un comunicado sobre la decisión de la Sala de Casación Penal, que considera que "no está demostrado aún que sea perjudicado directo de la conducta punible investigada en las diligencias previas adelantadas en contra de la exsenadora Piedad Esneda Córdoba Ruiz."
La exlegisladora afronta en la CSJ una causa por sus presuntos nexos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), guerrilla ante la que medió y logró la liberación de 15 cautivos, entre ellos varios políticos y uniformados.
La Sala subraya, además, que hay una condición "de carácter sustancial, consistente en que solamente es titular de la acción civil dentro del proceso penal quien sea perjudicado con la conducta punible investigada y en este caso hay ausencia de este requisito".
El exmandatario (2002-2010) presentó el pasado 3 de agosto esta petición para ser reconocido como víctima, dentro de la investigación preliminar que afronta Córdoba en el proceso de la llamada "farcpolítica".
El exgobernante ya había presentado una solicitud similar el pasado 16 de junio que fue rechazada a comienzos de julio, en la que reclamaba una copia del expediente de Córdoba, que se le negó bajo el argumento de que la calidad de víctima debe ser justificada por el solicitante.
Uno de sus abogados, Jaime Lombana, explicó en junio que el exmandatario buscaba "conocer el expediente y las diligencias y vislumbrar qué información se encuentra derivada de los correos" de dos rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) muertos en combate con las autoridades.
Lombana añadió que se pretende "conocer" de los correos del "Mono Jojoy" (alias de Víctor Julio Suárez Rojas, jefe militar de las FARC), "si existía relación entre este señor y la señora Córdoba".
Asimismo, quiere precisar, según señaló ese día el letrado, si de la información de los correos cruzados entre el guerrillero y la exparlamentaria "se deriva algún perjuicio al Estado colombiano y al ciudadano Álvaro Uribe".
Córdoba fue separada en septiembre del año pasado de su escaño en el Senado por la Procuraduría General tras considerar que había pruebas de sus nexos con esa guerrilla.
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