Susana Díaz no ha sido aún convocada por Sánchez en su ronda con los barones

    • Desde Ferraz aclaran que la intención del líder socialista es hablar con todos los dirigentes autonómicos antes del sábado.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, no ha sido por el momento convocada por el secretario general, Pedro Sánchez, en la ronda de contactos que desde este lunes mantiene con los líderes territoriales del PSOE para hablar sobre el congreso que el partido celebrará este sábado. Desde el PSOE-A aseguran "no tener constancia" de ninguna convocatoria, mientras fuentes de Ferraz afirman que los encuentros corresponden a la agenda privada del secretario general, si bien la intención es dialogar con todos antes del sábado. En encuentros bilaterales en Ferraz, si las agendas lo permiten, o por teléfono, cuando no queden más opciones.

Sánchez habló ayer en Ferraz con dos de sus barones afines: el murciano Rafael González Tovar y el castellano-leonés Luis Tudanca. Conversaciones en las que el líder socialista trató de tranquilizar ante el envite de Podemos: la disposición es, dijo, hablar con todas las fuerzas políticas para tratar de formar gobierno. Este martes, el encuentro, con el presidente aragonés, Javier Lambán, perteneciente a la corriente crítica, se prevé más árido. Lambán ha marcado como exigencia para cualquier negociación con Podemos el estricto respeto a la Constitución y el rechazo expreso a la consulta en Cataluña.

Para ello, Sánchez ha cancelado distintos actos que tenía previstos para esta semana. También el secretario de organización, César Luena, contactará con distintas federaciones antes del fin de semana. El objetivo es, ante todo, aplacar el incendio que se prevé en el Comité, con un 'orden del día' no escrito y con dos puntos: la cesión de senadores a los independentistas, ERC y DiL, y la negociación sobre la oferta de Podemos. Sánchez cedió a última hora de este lunes a la presión de sus barones más críticos ofreciéndoles ratificar cualquier alianza postelectoral, después de que desde la Ejecutiva se hubiese insistido durante todo el día en que no existía obligación de hacerlo.

El líder socialista trata además de consensuar con sus dirigentes una fecha para la celebración del congreso del que saldrá el nuevo secretario general. Un asunto que ya provocó divisiones entre la dirección y algunos barones críticos, entre ellos Díaz. La presidenta andaluza es partidaria de respetar los tiempos, entre febrero y marzo, mientras el entorno de Sánchez propone retrasarlo dada la situación de inestabilidad política. Este mismo lunes, Luena dejó un amplio margen para su convocatoria, aplazándola incluso hasta mayo.

En las últimas semanas, Díaz se mantiene cauta en sus críticas a Sánchez. Insiste en pedir "prudencia y respeto" ante las posibles negociaciones para formar gobierno, que aplaza a una vez haya finalizado la nueva ronda de contactos de Felipe VI. El monarca ha convocado a Sánchez para el próximo martes, con lo que el candidato socialista acudirá a La Zarzuela una vez ya haya escuchado las exigencias de sus barones.

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