Tejeiro dice que en la sede de Nóos no se distinguían unas empresas de otras

  • El exsecretario del Instituto Nóos Miguel Tejeiro afirmó al juez que la sede de esta entidad en Barcelona, compartida con otras empresas relacionadas con Iñaki Urdangarin y su socio Diego Torres, era "un local diáfano" en el que "no había manera de distinguir qué parte era de una empresa y cuál de otra".

Palma, 14 feb.- El exsecretario del Instituto Nóos Miguel Tejeiro afirmó al juez que la sede de esta entidad en Barcelona, compartida con otras empresas relacionadas con Iñaki Urdangarin y su socio Diego Torres, era "un local diáfano" en el que "no había manera de distinguir qué parte era de una empresa y cuál de otra".

En su declaración judicial el pasado sábado ante el juez del caso Palma Arena, el que fue contable de entidades gestionadas por Urdangarin y Torres indicó que en el local de la capital catalana había dos mesas de dirección para estos dos últimos y trabajaban unas quince personas, pero que no se diferenciaban las distintas sociedades.

La Fiscalía Anticorrupción de Baleares sostiene que el duque de Palma y su socio montaron un "entramado societario" para "apoderarse" de fondos públicos y privados que recibía el Instituto Nóos.

Estas empresas supuestamente "fantasma" son la inmobiliaria Aizoon (propiedad de Urdangarín y la Infanta Cristina), así como Nóos Consultoría, el bufete Tejeiro, Virtual Estrategies, Intuit, Shiriaimasu y De Goes Center for Stakeholder Management, estas últimas vinculadas a Torres y familiares suyos y que, en muchos casos, comparten sede social.

Según Tejeiro, en una ocasión acudió "a ver las oficinas de Sant Cugat", una localidad en la que estaban, al menos, las sedes de Intuit y Virtual Estrategies.

Urdangarin y Torres le enseñaron este espacio, que, según dijo, estaba "compartimentado", a diferencia de la sede de Barcelona.

El imputado detalló además que Urdangarin y Torres eran los que "en cada momento decidían si la nómina de un trabajador se tenía que cobrar de una u otra empresa".

Preguntado acerca de por qué Torres tenía tantas sociedades a su nombre, el imputado afirmó que "porque siempre ha querido separar sus asuntos".

Anticorrupción sospecha que los principales imputados en esta pieza del caso fijaban unos precios "totalmente desproporcionados por los servicios que prestaba" Nóos y luego la Administración de turno "simulaba" la contratación de "servicios ficticios" o inflados, de manera que los fondos públicos acababan "en manos de mercantiles controladas por Diego Torres e Iñaki Urdangarín".

Por otro lado, Miguel Tejeiro reconoció que cobró 14.000 euros por moderar coloquios y hacer dos ponencias en los eventos Illes Balears Forum y Valencia Summit, por los que Nóos recibió 5,8 millones de euros.

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