Temer, el vicepresidente y estratega de la articulación política de Rousseff

  • Michel Temer, un político experimentado en el arte de las alianzas, asumió hoy su segundo mandato como vicepresidente de Brasil, de nuevo con el mismo reto de hace cuatro años: el de tejer la articulación política que facilite la gobernabilidad de Dilma Rousseff hasta 2018.

Waldheim G. Montoya

Brasilia, 1 ene.- Michel Temer, un político experimentado en el arte de las alianzas, asumió hoy su segundo mandato como vicepresidente de Brasil, de nuevo con el mismo reto de hace cuatro años: el de tejer la articulación política que facilite la gobernabilidad de Dilma Rousseff hasta 2018.

El papel del vicepresidente toma más protagonismo para el nuevo mandato de Rousseff después de que el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y la base aliada, encabezada por el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), de Temer, perdieron espacio en el Congreso ante la oposición y movimientos minoritarios.

A pesar de existir en Brasil la Secretaría de Relaciones Institucionales, órgano con estatus ministerial para el enlace entre el Ejecutivo y el Legislativo y que tendrá como titular al diputado Pepe Vargas (PT), será Temer siempre el primer llamado a convocar a las fuerzas políticas para respaldar a Rousseff en el Congreso.

En 2010, en el último año de Gobierno del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, Temer cumplió un importante papel desde la Presidencia de la Cámara de Diputados y su labor en el Congreso a favor de la bancada de apoyo impulsó su nombre para integrar la fórmula en la candidatura de Rousseff.

Temer preside el PMDB, la mayor colectividad política del país y principal soporte en la coalición del Gobierno de Rousseff, partido que además cuenta entre sus principales cuadros políticos con el expresidente José Sarney (1985-1990).

Michel Miguel Elías Temer Lulia es un abogado de 74 años, nacido en una familia de origen libanés en el municipio de Tieté, en el interior de Sao Paulo y desde temprana edad ayudó a su padre, un comerciante de Betabura, región de El Koura, en el norte del Líbano, y quien llegó a Brasil en 1925.

Tres veces presidente de la Cámara baja, Temer se graduó como abogado de la Universidad de Sao Paulo (USP), la mayor del país, y realizó una especialización en derecho constitucional en la Pontificia Universidad Católica (PUC) de la misma ciudad.

El político es padre de cuatro hijos y está casado por segunda vez, la última en 2003 con Marcela Temer, 43 años menor que su marido y quien en la primera posesión de Temer, en 2010, robó los flashes y cámaras por su belleza.

Profesor de la PUC y de la Facultad de Derecho de Itú, en el interior del estado de Sao Paulo y de la que fue uno de los fundadores, el vicepresidente es autor de cuatro libros sobre derecho constitucional.

En cargos públicos, el vicepresidente fue dos veces secretario de Seguridad Pública en el estado de Sao Paulo, desde la que creó la primera comisaría especializada en atención a las mujeres víctimas de la violencia en el país, y fue procurador general de la misma región.

El sillón de la Presidencia, que en los últimos cuatro años ocupó en reiteradas veces para relevar interinamente a Rousseff, no era extraño para Temer, quien en el Gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002) estuvo dos veces en el cargo por la ausencia del entonces mandatario y de su vicepresidente Marco Maciel.

El nombre de Temer ha sido citado en la investigación de varios escándalos de corrupción que vinculan a políticos, incluso antes de que el PT llegara al Gobierno, pero nunca el vicepresidente fue acusado formalmente o inhabilitado políticamente.

Visto como un garante de estabilidad en la coalición de Rousseff y a pesar de su influencia dentro del PMDB y ante otros partidos y esferas de la vida pública del país, Temer es dueño de un perfil discreto que sabe mover los hilos del poder.

En los últimos días, Temer participó activamente en las negociaciones de reparto de cargos de la coalición de Gobierno y ayudó a Rousseff a enfrentar críticas, incluso del propio PT, que se sintió amenazado de perder ministerios cedidos a otras formaciones que ganaron espacio en las elecciones de octubre.

Mostrar comentarios