Una orden judicial impedía al agresor acercarse a su esposa e hijas a menos de 100 metros

Santiago de Compostela.- Una orden dictada por un juzgado de A Coruña impedía a H.G., el hombre de origen marroquí que ayer disparó contra su esposa en esta ciudad, acercarse a ella a menos de 100 metros y a ninguna de las tres hijas de ambos.

La secretaria general de la Igualdad de la Xunta, Marta González, aseguró hoy, en declaraciones a los periodistas, que dicha orden judicial fue dictada en marzo de este mismo año.

Marta González ha mostrado su condena ante lo que calificó como "un nuevo caso de violencia de género, claramente", un acto que calificó como "una de las mayores vergüenzas de nuestra sociedad, y en la que todas y todos tenemos responsabilidad".

Explicó la secretaria general de Igualdad que la víctima es una mujer de origen marroquí que había denunciado a su marido por malos tratos y que había ingresado con sus tres hijas menores en una casa de acogida tutelada por el Gobierno gallego.

Sin embargo, señaló que la mujer había abandonado "por propia voluntad" el centro. "Creemos que existió, por su parte, un cierto desconocimiento de la situación de peligro en la que se encontraba", dijo González.

La secretaria general animó a todas las personas, en general, y a las mujeres que sean víctimas de la violencia machista, en particular, a denunciar a sus presuntos agresores y a alejarse de ellos, "porque -indicó- eso sólo redundará en su protección".

Asimismo, aseguró que desde los órganos competentes de la Administración autonómica ha habido "un seguimiento muy atento de la situación de la mujer y de su familia".

Sobre el estado de salud de la mujer agredida, la secretaria general indicó que recibió un tiro en la cara y que se encuentra en estado grave, aunque estable, en el Hospital Universitario de A Coruña.

El agresor fue detenido esta mañana en el municipio coruñés de Culleredo.