Valladolid.- El cocinero guipuzcoano Bruno Oteiza ha reconocido hoy que la virtud de un pincho es que sea "práctico y audaz", y que su denominación sea un poco "mágica".
Oteiza (San Sebastián, 1970) ha hecho estas declaraciones a los periodistas durante la inauguración del VI Concurso Nacional de Pinchos y Tapas Ciudad de Valladolid.
Propietario del restaurante Biko, uno de los cincuenta mejores del mundo según la lista internacional The World's 50 Best Restaurant Awards, ha indicado que las tapas y los pinchos son parte de la cultura y "una forma de vida".
Oteiza ha destacado la calidad de los más de sesenta participantes del concurso vallisoletano y la unión existente entre los hosteleros de Valladolid y las administraciones públicas, que contribuyen al renombre nacional e internacional que el concurso está adquiriendo.
En cuanto a la crisis económica, Oteiza ha admitido que "ha sido un año muy duro" para los bares y restaurantes, "igual que lo ha sido para todos".
Un cocinero de renombre como Oteiza, que ha hecho varios programas de cocina en televisión, ha asegurado que "es muy importante" contar con apoyos institucionales.
Como jurado, lo más importante en un pincho es el sabor, ha admitido Oteiza, que ha destacado además la creatividad, la originalidad, concepto y la relación calidad precio.
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