Suu Kyi alerta que la violencia interétnica amenaza el desarrollo en Birmania

Bangkok, 21 sep.- La líder de la oposición birmana, Aung San Suu Kyi, alertó hoy del riesgo que sufre el desarrollo del país debido a los conflictos con las guerrillas de las minorías étnicas y la violencia sectaria, informó la prensa local.

En una intervención en un foro económico en Singapur, Suu Kyi indicó que a pesar de la firma de acuerdos de alto al fuego con varios grupos armados todavía no se ha logrado un acuerdo de paz y que sigue habiendo conflictos entre la mayoría budista y la minoría musulmana.

"A menos de que podamos resolver todo esto, no podremos tener el tipo de sociedad estable y pacífica donde uno se sienta feliz de poder invertir", dijo Suu Kyi en su discurso reproducido por la televisión Channel News Asia.

La premio Nobel de la Paz también señaló la necesidad de reforzar el Estado de Derecho en el país y llamó a los inversores a seguir apostando por Birmania (Myanmar) a pesar de los problemas de corrupción y falta de independencia de la justicia.

"No les recomendaría que se vayan. Me gustaría que siguieran invirtiendo pero de la manera más responsable posible", dijo Suu Kyi que defendió un "optimismo con cautela" sobre el proceso de reformas democráticas y económicas impulsado por el Presidente Thein Sein.

Cerca de 250 personas han muerto desde el año pasado en varios brotes de violencia sectaria, la mayoría de ellos miembros de la minoría musulmana rohingya, que también han dejado a más de 100.000 personas desplazadas y miles de casas quemadas.

"Si la gente teme que la maten, que le roben sus bienes o que le quemen la casa, no se podrá persuadirles para que se sienten y resuelvan sus diferencias", añadió Suu Kyi que pidió comprensión y que no se simplifique el conflicto para evitar condenar una comunidad u otra.

Birmania tiene cerca de 60 millones de habitantes, de los que el 89 por ciento son budistas, un 4 por ciento musulmanes y el resto de otras religiones.

Las minorías étnicas del país son los shan, karen, rakhine, mon, kachin, chin y kayah, y representan más del 30 por ciento de la población.