Colombia, en horas cruciales para alcanzar un histórico acuerdo con el ELN

  • En Quito, Ecuador, han comenzado las negociaciones por las cuales el presidente José Manuel Santos busca alcanzar "la paz completa", tras su decisión con las FARC.

    Hay seis puntos claves en la 'hoja de ruta' hasta alcanzar un pacto que se prevé arduo y difícil. El ELN cuenta hoy con 1.500 guerrilleros y se le atribuyen 16.000 crímenes. 

Una guerrillera del ELN.
Una guerrillera del ELN.
Diego Caldentey

Este martes era uno de los días más esperados por miles de colombianos desde hace meses. Las delegaciones del Gobierno de Colombia y las máximas autoridades de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda más importante del país, han comenzado a negociar un acuerdo de paz que se prevé arduo y difícil.

Te puede interesar: El Gobierno colombiano y las FARC ultiman en La Habana un nuevo acuerdo de paz

José Manuel Santos, presidente colombiano, pretende completar la fase que ha iniciado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para alcanzar lo que él ha llamado "la paz completa" en el país sudamericano.

Te puede interesar: Acuerdo de paz en Colombia tras 52 años de terror.

El pasado día 2 las negociaciones con el ELN se desbloquearon, tras un requisito que el Ejecutivo colombiano consideraba imprescindible: la liberación del ex congresista Odín Sánchez Montes de Oca. Si el ELN no cumplía con este requerimiento, nadie se iba a sentar a negociar en Quito, Ecuador, sede elegida finalmente para acercar posturas entre ambas partes.

Sánchez Montes confirmó que se pagó un rescate por su puesta en libertad. Llevaba cautivo desde el pasado abril, al canjearse por su hermano Patrocinio, que tenía problemas de salud y había permanecido dos años y medio en manos del ELN.

Según fuentes del Gobierno colombiano, lo que pretende Santos es que las Farc y el ELN queden enmarcadas en "un solo marco jurídico". A su vez, para llegar a esta instancia, el Gobierno ha puesto en libertad a dos guerrilleros que permanecían presos y que habían sido nombrados gestores de paz, otra de las condiciones para el inicio del proceso.

La delegación del ELN está encabezada por Israel Ramírez, alias Pablo Beltrán. El líder de la delegación del Gobierno en las negociaciones, por su parte, es Juan Camilo Restrepo, quien se felicitó por llegar a esta instancia, con el comienzo del diálogo.

Durante tres años, ambas partes comenzaron en silencio a intentar acercar posturas. De todas formas, este comienzo de diálogo difiere bastante de lo ocurrido por con las FARC. Ariél Ávila, subdirector de la Fundación Paz y Reconciliación de Colombia, experto en estos temas, no ha dudado en afirmar también que en definitiva los procesos serán distintos.

"El proceso con el ELN va a ser muy diferente al de las FARC, es mejor no compararlos porque no va a ser la misma dinámica. Por ejemplo, el ELN tiene un componente de mesa social que son los primeros tres puntos. De ahí no es claro qué y cómo es la mesa social, quiénes van a ir, quiénes van a ser elegidos, cuántas mesas departamentales, cuántas mesas nacionales o si van a ser mesas temáticas, si las decisiones van a ser vinculantes o no", ha afirmado.

El ELN, grupo de orientación marxista leninista surgido en 1964 y al que la Fiscalía colombiana atribuye en torno a 16.000 crímenes en las tres últimas décadas, cuenta en la actualidad con unos 1.500 combatientes armados.

Básicamente, en la mesa de negociaciones hay seis puntos claves y trascendentes. El primero es definir el rol y la participación de la sociedad civil en esta instancia: será por medio de propuestas e iniciativas sobre los temas de la agenda y podrán presentarse en el transcurso del proceso.

Como segundo punto destaca la denominada 'democracia para la paz': a través de un debate se examinarán las decisiones de la sociedad en los problemas sociales que la afectan en el acuerdo.

En tercera instancia se crearán programas para superar la pobreza y buscar la equidad de la sociedad. Además, se adelantarán planes alternativos con enfoque territorial.

Uno de los temas más arduos en la negociación será el de las víctimas y el reconocimiento de sus derechos: verdad, justicia, reparación y garantía de no repetición y no olvido. Bajo esta premisa, se trabajará en el perdón y la reconciliación.

Finalmente, se trabajará en definir la situación jurídica de los miembros del ELN y las garantías de seguridad para la vida civil y para ejercer política. Otro de los puntos es el cese del fuego bilateral. También se construirá un acuerdo sobre las armas para poner fin al conflicto armado.

Al final de esta 'hoja de ruta' se prevé la implementación de todo lo acordado: estará definida por un plan general de ejecución. Dicho plan contará con un cronograma. Además, existirán mecanismos de control, seguimiento y verificación donde participará la sociedad civil, el Gobierno, los miembros del ELN y la comunidad internacional. La ejecución del plan comenzará cuando se llegue a la firma del acuerdo final, y una vez ocurra se dará inicio al Plan General de Ejecución de dichos acuerdos.

Mostrar comentarios