Francisco ha pedido con "un cierto sentido de urgencia" a todos los responsables y líderes políticos para que "se prevea un inmediato alto el fuego".
En este sentido, ha precisado que ese cese del uso de las armas "se imponga y respete al menos por el tiempo necesario para consentir la evacuación de los civiles, sobre todo de los niños que están todavía atrapados bajo crueles bombardeos".
El Pontífice también ha recordado que mañana jueves, 13 de octubre, se celebra la Jornada internacional por la reducción de los desastres naturales, que este año propone el tema 'Reducir la mortalidad'.
Así, ha señalado que los desastres natural podrían ser "evitados o al menos limitados". Según el Papa, los efectos de las catástrofes naturales a menudo se deben a una falta del cuidado del ambiente por parte del hombre y ha alentado a "unir los esfuerzos de forma amplia en la tutela de nuestra casa común, promoviendo una cultura de prevención".
Por ello ha pedido que se pongan al servicio de la prevención "los nuevos conocimientos, reduciendo los riesgos para las poblaciones más vulnerables".
Asimismo, durante la catequesis de la audiencia general el Pontífice ha reflexionado sobre la misericordia y ha pedido a los fieles que centren la meditación en "las obras corporales y espirituales".
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