La "generación de oro" checa celebra su octava victoria en la Copa Federación

Praga, 9 nov.- El equipo checo femenino de tenis, al que llaman en su país la "generación de oro", celebró hoy en Praga su octava victoria en la Copa Federación, al vencer 3-0 a Alemania.

Petra Kvitova, Lucie Safarova, Andrea Hlavackova y Lucie Hradecka conquistaron en la pista rápida del O2 Arena praguense la ensaladera de la Fed Cup, y pasan a engrosar la leyenda del tenis femenino de marca checoslovaca y checa, que ya se apuntó victorias en 1975, 1983, 1984, 1985, 1988, 2011 y 2012.

Las eslavas consolidan su segunda posición en la tabla de vencedores de este torneo, tras los EE.UU., que acumulan diecisiete victorias.

Petra Kvitova, cuarta jugadora del mundo, fue la encargada de lograr hoy el tercer y decisivo punto en un emocionante partido que terminó 7-6 (5), 4-6, 6-4 ,que atravesó muchas fases, incluidos serios problemas musculares de la checa, y en el que se desplegó un tenis de altísimo nivel.

"No sé qué paso, algo dentro de mí, que logré sacar en el momento oportuno", declaró Kvitova al canal público "CT Sport" al finalizar el encuentro, en el que tuvo que ser atendida por el médico, y en el que consiguió remontar un resultado adverso de 1-4 en la última manga.

La tenista, de 24 años y cuarta del mundo, señaló que al final del partido se encontraba "totalmente agotada", ya que fue "arriba y abajo". "Pero jugamos un gran tenis, y luchamos por cada pelota".

La ganadora de la pasada edición de Wimbledon añadió: "Creo que ha sido el partido más difícil de mi trayectoria, y me alegro de haberlo ganado ya que no sabemos qué habría ocurrido en el siguiente partido".

La número dos checa, Lucie Safarova, decimoséptima del mundo, fue varias veces al vestuario para prepararse de cara a ese posible cuarto encuentro contra Sabine Lisicki, que al final no tuvo lugar.

"Es increíble, indescriptible. Petra ha demostrado que sabe jugar con el corazón", dijo Safarova al finalizar el emocionante partido, con un resultado que deja un buen sabor de boca al tenis checo.

"¿Una generación de oro? Tal vez", asintió la tenista checa, que espera que esta ensaladera "no sea la última".

El capitán del equipo, Petr Pala, destacó por su parte que "fue un partido increíble, desde todos los puntos de vista. Hay que felicitar a las dos, por sus ganas de vencer. Y fue Petra la que tuvo la suerte de vencer. Se levantó de una forma increíble".

Sobre el estado que atraviesa el tenis checo, el jefe del combinado checo, que en primera ronda venció a España, y en semifinal a Italia, aseveró que "las chicas son muy buenas, hay muchas, y estoy feliz. Debo agradecer a todas las que han participado".

"Hoy fue la guinda y fue una victoria grandiosa", apostilló Pala.

La veterana tenista checo americana Martina Navratilova también reconoció que el partido "fue muy dramático y se ganó mentalmente, más que físicamente. Alguien tenía que ganar, pero Kerber jugó magistralmente. Fue un tenis excelente".

Navratilova, que ganó cuarenta veces en Fed Cup y sólo perdió una vez, aconsejó al final a Kvitova: "Ahora disfruta de las vacaciones. Porque la nueva temporada comienza enseguida".