Los chinos usan drones para vigilar los exámenes de selectividad a 500 metros de altura

    • La selectividad chinaes un hito de carácter decisivo para millones de estudiantes que compiten por acceder a la formación universitaria.
    • Las familias chinas están muy preocupadas por la limpieza de esta prueba para la que invierten durante años muchos esfuerzos y ahorros.
Escriba chino en el Museo del Templo Confuciano de Changchun
Escriba chino en el Museo del Templo Confuciano de Changchun
J.Telletxea
Javier Telletxea

El examen chino de selectividad o "gaokao" (高考) es un hito de carácter decisivo para millones de estudiantes que compiten por acceder a la formación universitaria. Probablemente se trata del representante más claro del espíritu meritocrático que rige el sistema educativo y el político, y su limpieza supone una preocupación constante para millones de familias chinas que, durante años, invierten todo su esfuerzo y ahorros para no desaprovechar esta oportunidad.

Por eso, no es de extrañar que en municipios como el de Luoyang (Henan) hayan decidido poner en práctica la tecnología de los drones para cazar a los tramposos más sofisticados, aquellos que año tras año han logrado colarse en los campus más selectos gracias a sus habilidades para burlar la -generalmente- estricta vigilancia.A 500 metros de altura

Según ha informado hoy el diario chino Cangkao Xiaoxi, los drones en cuestión se elevarían a unos 500 metros de altura sobre las zonas en que se llevarán a cabo los exámenes, desde donde podrán detectar señales sospechosas y localizar su fuente. De ese modo, los encargados de controlar los drones podrían acceder a la ubicación de los estudiantes fraudulentos y sus compinches, quienes podrían despedirse de volver a participar en el examen.

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De acuerdo con la fuente mencionada, este nuevo intento de combatir tecnología con tecnología viene de manos del Departamento de Telecomunicación Inalámbrica de la ciudad de Luoyang, en el centro-este del país, cuyo director, el señor Zeng Ying Yong, también comparte la preocupación por las nuevas formas de engaño en exámenes y oposiciones.

No en vano, entre las formas de fraude más avanzadas de los últimos años se encuentran los auriculares implantados en el oído interno o los bolígrafos con pequeñas cámaras incorporadas, aunque la historia de los "métodos alternativos" para superar el examen cuenta con un recorrido tan largo como el de los propios exámenes imperiales, en los que ya había quienes se presentaban con alguna pequeña ayuda bajo la manga.

(Javier Telletxea es sociólogo e investigador en la Universidad china de Jilin y autor del blog historiasdechina.com)

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