Los familiares de los desaparecidos en Indonesia pierden la esperanza de encontrarlos con vida

Las autoridades indonesias reanudaron hoy las tareas de búsqueda de los dos turistas españoles desaparecidos en el naufragio de un barco de recreo en el sureste de Indonesia el pasado 16 de agosto.

El operativo de búsqueda se reanuda después de que la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres de Indonesia anunciase el sábado que se suspendía. Los equipos de rescate dieron por terminada la búsqueda una vez superados los siete días que establece el protocolo indonesio en este tipo de accidentes sin que se encontrara ningún rastro de los desaparecidos.

El Gobierno indonesio ha reculado después de que el el ministro de Exteriores español, José Manuel García Margallo, llamara el domingo a su homólogo indonesio, Marty Natalegawa, para pedir que prosiguieran la búsqueda de los turistas desaparecidos, Jorge de Miguel y Víctor García.

Los dos españoles desaparecieron el pasado 16 de agosto cuando la embarcación en la que viajaban junto con otras 23 personas zozobró frente a las costas de la isla de Sumbawa, en el sureste del archipiélago, tras chocar contra un arrecife de coral.

Desde entonces, los equipos de rescate indonesios han intentado localizar sin éxito a los dos desaparecidos en un rastreo en el que participaron hasta unas 150 personas, nueve embarcaciones y varios helicópteros.La búsqueda, que llegó a extenderse hasta la isla de Bali, a unos 360 kilómetros al oeste del lugar del naufragio, se vio complicada por las fuertes corrientes y remolinos marinos provocados por los estrechos entre las diversas islas de la zona.

Las autoridades de ese país ponen en duda los testimonios que apuntaban a que los dos desaparecidos españoles fuesen vistos por un pescador en la isla de Sangeang, una versión a la que se agarran los parientes para sostener que Víctor y Jorge haber alcanzado la costa y estar vivos aunque perdidos.

La embarcación de madera carecía de radio o sistema de GPS, por lo que no pudo emitir una alerta, y los náufragos se agarraron a una parte del barco que se quedó a flote y al bote salvavidas con capacidad para sólo cuatro personas.

Cinco de ellos nadaron durante horas hasta llegar a la isla de Sangean, donde bebieron orina y comieron hojas y fueron rescatados por unos pescadores.Los familiares pierden la esperanza

Dos días después de confirmarse la desaparición de los dos españoles, familiares y amigos formaron una expedición para ayudar a las autoridades de aquel país en las labores de búsqueda.

En un comunicado conjunto, la familia de los dos españoles se mostraban convencidos de que es posible que ambos llegaran nadando a una isla próxima al lugar del hundimiento. "Estamos convencidos de que Víctor y Jorge pudieron llegar a la isla de Sangean, a pesar de las inclemencias del tiempo y el mal estado de la mar", señala la nota, en la que detallan que los dos desaparecidos "son personas fuertes, experimentadas en viajes internacionales a zonas difíciles y conocen bien el área en la que se encontraban".

Sin embargo, con el paso de los días y los escasos resultados, la esperenza que albergaban se ha desvanecido. Los familiares no han encontrado ninguna "evidencia" que induzca a pensar que estos náufragos "estén o hayan estado" en la isla de Sangeang, según ha informado a Europa Press un portavoz de las familias tras las recientes labores de rastreo en esta isla.

La expedición de familiares y amigos logró desembarcar el domingo en la isla de Sangeang, donde sospechan que podrían haber llegado a nado, y realizó una inspección aérea con un helicóptero fletado, pero sin ningún éxito.

Sin embargo, el portavoz de la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres de Indonesia, Sutopo Purwo Nugroho, aseguró que no tenía constancia sobre las actividades de los familiares ni ninguna comunicación por parte de las autoridades españolas.

Un portavoz de las mismas ha explicado que gracias a una embarcación neumática Zodiac, las familias han desembarcado en la isla en compañía del máximo representante de la embajada de España en Yakarta, con quien los hermanos de Víctor García Montes y de Jorge de Miguel han rastreado la abrupta geografía de esta isla coronada por un volcán. Tras estas labores de rastreo, no habría sido localizada ninguna "evidencia" de que estos dos ciudadanos españoles "estén o hayan estado" en la isla de Sangeang, a la que intentaron llegar a nado después del naufragio.Los otros dos españoles rescatados ya están en España

El resto de los 23 ocupantes del barco, incluidos los españoles Rafael Martínez y María Pallol, fueron rescatados tras el naufragio.

Martínez y Pallol, llegaron este domingo al aeropuesto Adolfo Suárez Madrid-Barajas en un avión procedente de Dubai sobre las 20.30 horas. La pareja afirmó a su llegada a España que la odisea por la que atravesaron no acabará hasta que no se localice a los otros dos españoles desaparecidos.

Visiblemente emocionados, han sido recibidos por sus allegados y familiares, quienes momentos antes de que aterrizaran en Madrid explicaron el calvario por el que han atravesado desde que conocieron que los dos jóvenes habían sido rescatados tras sufrir un naufragio en Indonesia, un país en el que, según consideran, no existen medidas de seguridad para los turistas.

Los españoles se han mostrado convencidos de que los dos desaparecidos se encuentran en una isla desierta situada a cinco millas náuticas del lugar del naufragio -en el trayecto de la isla Lombok a la de Komodo- y hacia donde nadaron tanto ellos, que fueron rescatados por un pesquero antes de tocar tierra, como el resto de los supervivientes. Martínez ha relatado que el madrileño y el sevillano partieron a nado desde la embarcación que se hundía 30 ó 40 minutos antes que el resto de los náufragos que decidieron nadar hacia tierra y que, por lo tanto, estima que "siguieron el mismo itinerario que ellos" y "siempre en dirección al cono del volcán" que había en la isla desierta, que era el punto de referencia en caso de que les desviarán las corrientes marinas o la marea.

Otros cinco, entre los que se encontraban Martínez y Pallol, decidieron cruzar también más tarde nadar hasta la isla, a pesar del cansancio, las quemaduras y las medusas, aunque fueron recogidos en mitad del trayecto por un barco.

Martínez vio por última vez a los dos desaparecidos cerca de las 15.00 horas del sábado, antes de empezar a nadar hacia Sangean, situada en el Mar de Flores y a escasos kilómetros de Sumbawa.

Los que se quedaron flotando cerca del bote salvavidas fueron rescatados, con síntomas de deshidratación, cansancio y quemaduras del sol, el domingo por la noche, dos días después del siniestro.