Al menos 1.634 personas han sido ejecutadas en 2015, un 50% más que en 2014

El número de condenados a pena de muerte descendió en el pasado 2015 pero no el número de víctimas. Amnistía Internacional alza la voz para alarmar de una realidad: al menos 1.634 personas han sido ejecutadas en 2015. Una cifra que supone un aumento de más del 50% con respecto al año anterior. Y lo que es más alarmante, el 89% de las ejecuciones se han llevado a cabo en sólo tres países países.

"El aumento de las ejecuciones el año pasado es sumamente preocupante. Nunca, en los últimos 25 años, habían sido ejecutadas tantas personas por estados de todo el mundo", ha subrayado el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty, a Europa Press. "En 2015, los gobiernos continuaron arrebatando la vida a muchas personas basándose en la falsa premisa de que con la pena de muerte estamos más seguros", ha añadido.

Más de 1.634 personas han sido ejecutadas en el último año. Una cifra que no es exacta porque falta por registrar las ejecuciones que se han llevado a cabo en China, un país en el que la pena de muerte se considera secreto de Estado. No obstante, Amnistía Internacional cree que es probable que más de mil personas hayan sido víctimas de la pena de muerte en la república.

Pero, quizás lo más alarmante es que de todas las ejecuciones registradas, el 89% se llevaron a cabo en solo tres países: Irán con más de 977, Pakistán con 326 y Arabia Saudí con más de 158 ejecuciones.Los principales verdugos del mundo

China sería el principal verdugo, sin embargo ya que los datos sobre sus ejecuciones no son públicos, Amnistía Internacional coloca en primer lugar a Irán. El país de Oriente Medio habría realizado más de 977 ejecuciones. Sólo Irán supone un 82% del total de las ejecuciones de 2015. Se trata de la mayor cifra en los últimos 25 años. Según la organización, el país ejecutó al menos a 16 mujeres y a cuatro menores de edad.

En este sentido, Amnistía Internacional ha lanzado una petición online para denunciar el caso de 46 condenados iraníes que eran menores de edad en el momento de su detención y que ahora se encuentran en el corredor de la muerte; así como de otros tres reos saudíes para los que la ONG "exige la anulación total de la condena".

Este es el caso de Barzan Nasrollah Zadeh un joven suní miembro de la minoría kurda de Irán. El Tribunal Revolucionario de Teherán lo condenó por ser culpable de "enemistad con Dios”, “tener conexiones con grupos salafistas” y por considerar que había participado en planes de asesinato, uno de ellos, el de un clérigo suní con vínculos con el gobierno que fue asesinado el 17 de septiembre de 2009.

Barzan tenía 17 años de edad en el momento de su detención. El Tribunal Supremo confirmó la sentencia de muerte en agosto de 2015. Este Tribunal no hizo referencia al hecho de que fuera menor en el momento de los delitos que se le imputan. Irán sigue manteniendo leyes que permiten condenar a muerte a niñas de tan sólo 9 años y niños de tan sólo 15. Amnistía Internacional ha documentado 73 ejecuciones de menores efectuadas entre 2005 y 2015.

El segundo verdugo es Pakistán. El país continuó con la oleada de homicidios sancionados por el Estado que había emprendido desde diciembre de 2014 y más de 320 personas fueron enviadas a la horca el pasado año. Se trata de la cifra más alta jamás registrada por Amnistía Internacional en este país.

Lo mismo pasa con Arabia Saudí. El país registra un incremento del 76% en comparación con 2014 con la ejecución del al menos 158 personas (4 mujeres y 154 hombres).

Y una vez más, por séptimo año consecutivo Estados Unidos cierra el quinteto de verdugos siendo el único país que aplicó la pena de muerte en América. El país ejecutó a 28 personas, registrando la cifra más baja desde 1991.Las ejecuciones más frecuentes dependiendo de los países

De acuerdo con el informe se ha podido saber cuáles han sido los métodos de ejecución más utilizados y el lugar en el que se han llevado a cabo: la decapitación fue el método más utilizado en Arabia Saudí, el ahorcamiento (Afganistán, Bangladesh, Egipto, India, Irak, Irán, Japón, Jordania, Malasia, Pakistán,

Singapur, Sudán, Sudán del Sur), la inyección letal (China, Estados Unidos de América, Vietnam) y por arma de fuego (Arabia Saudí, Chad, China, Corea del Norte, Emiratos Árabes

Unidos, Indonesia, Somalia, Taiwán, Yemen).

Al igual que ocurrió en años anteriores, Amnistía Internacional no recibió información sobre ejecuciones

judiciales por lapidación. Sin embargo, la organización ha conseguido saber que dos mujeres fueron condenadas a muerte por lapidación por cometer “adulterio” estando casadas, una en Maldivas y la otra en Arabia Saudí. La mujer de Maldivas obtuvo la anulación de su declaración de culpabilidad y de la pena de muerte. Por su parte, en Arabia Saudí se revisó el caso y se conmutó a la mujer la condena a muerte en diciembre. Asimismo, se llevaron a cabo 58 ejecuciones públicas en Irán. Motivos para creer en la abolición

No obstante, pese a que los datos son alarmantes y que además, ha aumentado el número de países que aplican la pena de muerte, pasó de 22 a 25... entre ellos Chad, donde el pasado agosto se fusiló a 10 presuntos miembros del grupo terrorista Boko Haram, tras 12 años sin realizar ninguna ejecución, hay motivos para creer en la abolición de la pena de muerte.

Por un lado, el número de condenas a muerte impuestas en el último año ha disminuido con respecto al año anterior. Al menos 1.998 han sido condenadas a muerte en 61 países en 2015, 468 menos que en 2014. Solo Estados Unidos ha registrado 52 condenas, el registro más bajo desde 1977.

Asimismo, a este dato positivo hay que sumar que la mayoría de los países del mundo, 102, han abolido ya por completo la pena de muerte por lo que los datos quedan así: en el mundo hay 140 estados abolicionistas ya sea en la ley como en la práctica, y 58 estados que son retencionistas.

Los últimos países en los que se ha conseguido la abolición son: la República del Congo, Fiji, Madagascar y Surinam. Del mismo modo, Mongolia se ha comprometido a llevar a cabo la abolición de la pena de muerte este año.