Caldas da Rainha (Portugal), 26 oct.- La justicia portuguesa reanudará este jueves el juicio a Andoni Zengotitabengoa, detenido en 2010 y acusado de montar en suelo luso un arsenal de 1.400 kilos de explosivos para los atentados de ETA en España.
Tras las cuatro sesiones celebradas el 13 y 14 de septiembre y el 3 y 4 de octubre, el tribunal que juzga a Zengotitabengoa espera concluir el proceso con la vista del jueves y el viernes próximos.
El juicio se celebra, en medio de fuertes medidas de seguridad, en el tribunal de Caldas da Rainha, a unos 100 kilómetros al norte de Lisboa y que tiene jurisdicción sobre la cercana localidad de Óbidos, donde la policía encontró los explosivos.
El presunto miembro de la organización terrorista ETA está en régimen de prisión preventiva en Lisboa desde marzo de 2010 y es el primer supuesto etarra juzgado en Portugal por delitos graves cometidos en este país.
Su proceso se ha visto alargado por el gran número de testigos convocados y las reclamaciones de la defensa.
La mayoría de los alrededor de cuarenta testigos llamados a declarar han sido convocados por la fiscalía lusa y sólo seis por la defensa, que, sin embargo, ha interrogado a casi todos de forma meticulosa y ha presentado quejas por supuestas contradicciones y coacciones.
Las dos últimas sesiones servirán para escuchar a seis policías y para que la fiscalía y la defensa presenten sus alegaciones finales.
En las cuatro jornadas ya celebradas, comerciantes, agentes inmobiliarios y vecinos identificaron a Zengotitabengoa y relataron sus movimientos desde 2008 en varias localidades portuguesas, junto a otro supuesto etarra, Oier Gómez Mielgo, detenido en Francia en abril.
Policías de Óbidos y Caldas da Rainha dieron cuenta en el juicio de la huida precipitada de los dos activistas en febrero de 2010, tras toparse con un control rutinario de tráfico.
Poco más de un mes después, Zengotigabengoa fue detenido en el aeropuerto de Lisboa con un pasaporte mexicano falso y un billete con destino a Venezuela.
Peritos e inspectores a cargo de la investigación detallaron en el juicio el contenido del almacén de explosivos en que se había convertido el chalet de alquiler de las afueras de Óbidos donde vivían.
En él aparecieron sustancias explosivas, temporizadores, sacos y bidones montados con mecanismos artesanales listos para ser accionados.
Los policías describieron a Zengotitabengoa como un experto en la fabricación de bombas, con importantes conocimientos químicos y dominio de inglés y francés.
El juicio ha revelado que ETA utilizaba Portugal como base de apoyo logístico desde 2007, según los informes policiales del proceso.
La organización terrorista alquilaba coches en Portugal, que fueron usados en algunos atentados cometidos en España, y transportaba y almacenaba artefactos explosivos en territorio luso.
El Tribunal de Relación de Lisboa ha aceptado entregar a España a Zengotitabengoa, cuando responda de sus actos en este país.
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