Primeras declaraciones de Salud Hernández-Mora: "Soy una imprudente y una idiota"

  • La periodista española era liberada este viernes por supuestos guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en una misión humanitaria en una zona selvática.

    La corresponsal de 'El Mundo' desaparecía sin dejar rastro el pasado sábado cuando se encontraba realizando un reportaje al noreste del país, en una zona controlada por el ELN.

Primeras declaraciones de Salud Hernández-Mora: "Soy una imprudente y una idiota"
Primeras declaraciones de Salud Hernández-Mora: "Soy una imprudente y una idiota"
B.C.A.

"La gente pensará que soy una imprudente y una idiota, y seguramente tengan razón. Soy una imprudente y una idiota", estas eran las primeras palabras de la periodista española, Salud Hernández-Mora tras ser liberada por supuestos guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) este viernes. 

La periodista se dirigió hacia el noreste del país, una zona controlada por el ELN, para realizar un reportaje del cual había avisado en el diario 'El Tiempo', medio local para el que la corresponsal también trabaja. Sin embargo, al llegar a la zona se le acercó una motocicleta y el conductor le dijo: "Súbase".

"No había nadie en la calle, así que me subí", ha explicado. Desde el inicio, tras retirarle el teléfono móvil y sus equipos, varias personas la trasladaron de un lugar a otro, siempre en zona selvática, y le advirtieron de que no debía salir de la zona porque "la estaban vigilando".Una zona en la que la policía no puede hacer nada

La periodista, colaboradora del diario español 'El Mundo', ha afirmado que si bien no le gustaría "estigmatizar" al pueblo de la zona en la que estuvo retenida, es importante el control que tienen las guerrillas. "Hay una estación de Policía que no sirve para nada, y no porque los agentes no sirvan, sino porque no pueden hacer nada: asoman la nariz y se la cortan porque hay francotiradores", ha relatado. "Su única misión es llegar a casa vivos", ha continuado.

Continuando con la historia, la reportera ha explicado que una vez le dijeron que le devolvían sus pertenencias y que se podía ir, comenzó otro trayecto, cambiando de moto en el camino, hacia Filogringo, desde donde iba a tomar un autobús para regresar al lugar de donde la habían llevado, Tibú.

No obstante, ha explicado que, dado que uno de los guerrilleros le había indicado que buscaría a un comandante para que hablara con ella, no se iba a ir hasta conseguirlo. "Yo seguía insistiendo en que quería hacer mi trabajo, quería hablar con un comandante para hacer la entrevista", relata. Tras dos horas de espera, el comandante no apareció y Hernández-Mora se vio obligada a dormir en la localidad.

"Entonces llega el comandante, me coge el equipaje y el equipo y me dice 'Aquí va a pasar usted unos días'", explica. En ese momento es cuando la periodista, explica, comienza a enfadarse.

"Me quedé con dos guerrilleros y les dije 'Soy idiota, no sé por qué me fío de ustedes'. Estuve enfadada dos días. Cada noche me cambiaban de un sitio a otro, todo el tiempo en zona rural, selvática, o en claros de la selva o en casas abandonadas", ha afirmado.Se enteró de que la estaban buscando

Mientras los guerrilleros le decían que "esto no va a ser largo", la periodista les explicaba que era "una estupidez" lo que estaban haciendo. "Pero ellos decían que estaban en territorio de guerra, que era una zona complicada", añade.

La reportera ha añadido que no se enteró de que la estaban buscando hasta que un día escuchó la emisora del Ejército. "Empezamos a escuchar 'Quien tenga información de Salud Hernández-Mora', y lo decían varias veces", indica. "El lunes tuvimos que salir corriendo porque se oyeron helicópteros cerca y nos escondimos en un cocal. El martes ya vimos los aviones espía", cuenta.

Aunque ha asegurado no sentir miedo, sí ha indicado que sentía preocupación, tanto por sus amigos y familiares como por los "soldados y militares" que la estaban buscando. "No quería que les pasara nada por mí".

Asimismo, ha indicado que entre algunos de los guerrilleros que la habían retenido se encontraban menores de edad, al menos dos de 16 y 17 años, con fusiles.

La periodista no ha querido concretar dónde se encontraba, y sólo ha afirmado que se encontraba "yendo por una carreterita de un lugar a otro".Se dudó de que fuera un secuestro

El pasado martes el Grupo Antisecuestro y Antiextorsión (GAULA) de la Policía colombiana aseguró que la investigación sobre la desaparición de la periodista española apuntaba que no se la habían llevado "contra su voluntad".El director del grupo, el coronel Fernando Murillo, informó al diario 'El Tiempo' --para el que trabaja la periodista, que también es corresponsal para el diario español 'El Mundo'-- de que un grupo de sus mejores efectivos trataban de establecer el paradero de Hernández-Mora pero que no se la llevaron por la fuerza."Tenemos claro que a ella en ningún momento se la han llevado contra su voluntad", indicó. "Sabemos, por indagaciones, que se dirigió a la vereda Filogringo, que se transportó desde la población de El Tarra hacia esa zona sólo con la compañía de un mototaxista, al que le pagó y se quedó allá", añadió.

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