Testimonios desde Homs: "El bombardeo es terrible. Salimos muy poco de casa"

Mirar el horror de la guerra en Siria es insoportable yla huidallega a ser para muchos la única salvación. "Durantelos últimos tres días la situación ha sido terrible,con un bombardeo de mortero incesante", explica unatrabajadora humanitariaque prefiere no dar su nombre. Colaboradora de una ONG, la mujer abandonó Homs este miércoles por la mañana, junto a su familia. Una decisión propiciada por la situación en la que se encuentra la ciudad, que califica de insostenible:"Las bombas han caído en todas las zonas, tanto en las controladas por el Gobierno como las de control rebelde. Más de50 personas han sido asesinadasy otras muchas heridas".

Una escalada de la violencia, que, aunque ocurre en toda la ciudad, se centra en la parte antigua, la llamada'Ciudad vieja', que incluye losbarrios de Bab Tadmur, Bab al-Dreib, Bab Hudy la ciudadela. "Comenzaron el asalto en esa zona antes de que nos marchamos, el miércoles por la mañana, pero todavía no tenemos nada de información", explica.

A pesar de que la situación en la ciudad es de guerra abierta, destaca que aún quedan muchos civiles que no han abandonado la ciudad. "En Homs quedan muchos civiles todavía, quizá no en la 'Ciudad Vieja', pero en el resto de barrios sigue viviendo gente. Siguen viviendo. Si necesitan algo, salen, cogen lo que necesitan y vuelven inmediatamente a casa", dice.

"Pero la ciudad está en una condición terrible, lastiendas están cerradas, las calles están completamente vacías,no se ve a nadie". Estejueves es festivoen el país, ocasión que muchos han aprovechado para escapar de la situación."Todo el mundo tiene familias fueraa las que ir a visitar y así poder salir unos días de la situación. Hoy es el día de celebración de la independencia de Siria yhasta el Domingo de Pascua tenemos cuatro días de fiestaque mucha gente ha aprovechado para, por lo menos,escapar unos días"."Hay tanques en la calle. Pero Homs está hoy de vacaciones"

Su retina se ha habituado a los "tanques y a columnas de humo"en el horizonte, tapando las azoteas de los pisos. La noche la asocia alzumbido de los morteros y a sirenas. Es una joven que celebra este jueves el camino 'tranquilo' desde su casa al trabajo, enun hotel en Homs(1,4 millones de habitantes), una ciudad deSiriaperseguida por las bombas, con barrios hechos escombros, con miseria y asediada por las tropas del régimen deBashar al Assad.

"Lagente intenta hacer su vida normal, a pesar de las explosiones. Pero muchas personas tienen miedo.Hoy es un día tranquilo, haygente por la calley hace horas que no oímos el sonido de las bombas", cuenta por teléfono esta joven empleada del hotel Safir, de Homs, que prefiere no dar su nombre.

Habla tranquila, de forma pausada –se oye desde el auricular un murmullo de voces. "Hay gente aquí en el hotel y estamos bien, seguros", explica cuando se le pregunta qué está pasando en Homs, de donde se cuenta que los blindados del ejército sirio siguen con su ofensiva para aumentar el control de los barrios que son bastión de los rebeldes. También de calles tomadas por yihadistas."Hay muchosterroristas.Están en la Ciudad Vieja de Homs", asegura.

Cuando se le pregunta por los blindados y los militares de Al Assad, responde que están en Homs por seguridad."El ejército nos protege…de los terroristas".

La joven cuenta que este jueves han amanecido tranquilos, que desde hace horas no sabe nada de explosiones y fuego, y que en Homs, están de vacaciones. También en Siria, hay días festivos. "Hoy los niños no han ido al colegio. Estamos de descanso, de vacaciones, y muchos sirios se preparan para el Domingo de Pascua", asegura esta empleada, que dice que hoy no tiene miedo.