¿Y si el invitado sorpresa fuera Alexis?

  • Revolviendo en el amplio armario del Barça, los técnicos pueden haber reparado en que la pieza para lucir ante el Milan estaba escondida, en el fondo. En un mundo de sensaciones, como es el fútbol, el chileno Alexis Sánchez llega en su mejor momento después de protagonizar una discreta temporada.

Francisco Ávila

Barcelona, 10 mar.- Revolviendo en el amplio armario del Barça, los técnicos pueden haber reparado en que la pieza para lucir ante el Milan estaba escondida, en el fondo. En un mundo de sensaciones, como es el fútbol, el chileno Alexis Sánchez llega en su mejor momento después de protagonizar una discreta temporada.

El tocopillano, fichado en el verano de 2011 como una estrella, no ha arrancado en el Barça. Triunfó en el Udinese, con un fútbol más directo, pero como azulgrana se ha dejado ver en cuentagotas.

Más que su calidad se ha visto su trabajo incansable, poco bagaje en un equipo que siempre precisa sumar talento. Además las lesiones le han lastrado desde su llegada y el chileno se ha ido diluyendo y aportando poco al notable juego azulgrana.

Sus números de esta temporada ofrecen las mismas dudas. Ha participado en 30 partidos y ha marcado 4 tantos. En la Liga ha disputado diecinueve partidos con dos goles anotados, ha marcado un tanto en cinco partidos de 'Champions' y dos en la Copa.

En total, cinco goles en 1670 minutos de juego, marca cada 334 minutos. Esos son los datos, pero el chileno parece haber recuperado las buenas sensaciones después del último partido liguero ante el Deportivo.

Alexis fue determinante. Marcó un gol y dio la asistencia del segundo a Messi. En un partido nada vistoso, el chileno se sintió a gusto y seguramente recordó los muchos partidos de ese estilo jugados en sus años como futbolista del Udinese, un encuentro muy similar al que el Barça se encontrará el próximo martes ante el Milan.

En el momento culminante, el Barça necesita un clic. Cuando el equipo se resiente físicamente y los goles de Leo Messi no llegan con la inercia con la que había acostumbrado a los culés, los azulgranas necesitan algo diferente.

Y en esas Alexis Sánchez puede tener su oportunidad. Sin que su fútbol sea ni mucho menos espectacular, el chileno llega en el mejor momento y el Barcelona podría agarrarse a cualquier detalle para sacar adelante una eliminatoria que se complicó en la ida cuando todo parecía controlado por los azulgranas.

"El martes hay una batalla y hay que ganarla", repite el tocopillano. Todo apunta que ante el Milan solo quedarán dos plazas libres en el equipo titular. Desde la defensa a la media no puede haber sorpresas (Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Busquets, Xavi e Iniesta), tampoco en la presencia de Leo Messi en ataque, la duda está en quién acompañará al argentino y esa decisión, en buena parte, marcará el partido.

En la ida y en los dos encuentros disputados ante el Real Madrid se demostró la necesidad de buscar soluciones cuando los rivales colapsan el juego de Messi acumulando jugadores en el centro.

Buscar el juego por las bandas o intentar fijar a los centrales con un nueve fijo son dos de las opciones, en ambas Alexis tiene cabida. Además David Villa no parece en su mejor momento ni tampoco Cesc Fàbregas, otro de los que podría jugar como falso nueve, mientras que Cristian Tello, una alternativa por la banda, luce más como alternativa que como titular.

Alexis puede estar ante su gran día. Le van estos partidos, esos encuentros cerrados y duros, esos días en los que el tocopillano cimentó su leyenda como 'el niño maravilla'. EFE.

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