El "coca-fan" número 1 de la Copa del Mundo de Fútbol acaba de terminarse de erigir en el barrio de Newtown Joburg, en la zona de recepción, divertimento y hospitalidad montada por los organizadores en la capital del país.
La escultura, bautizada como "Crafetefan", se eleva a una altura de 16,5 metros y ha sido diseñado para la popular marca de bebidas carbonatadas por Porky Hefer, de la agencia Animal Farm.
Se trata de una iniciativa de reciclaje, que se basa en un esqueleto de andamios revestidos de alrededor de entre 2500 y 3000 cajas de botellas de 1.25 litros de Coca-Cola, bien ancladas unas a otras para que el robot azucarado de 25 toneladas no caiga sobre los fans de la Roja que celebren allí, tanto el partido contra Honduras, como la posible final de nuestra selección.
Y es que su color rojo, así como su actitud profética, como haciendo los cuernos de un toro, le convierten automáticamente en un talismán que animará a nuestra selección hacia una hipotética final en Johannesburgo.
Una vez que la competición acabe, todos los materiales serán reutilizados: los andamios para las obras de deconstrucción del Mundial y las cajas de Coca-Cola para albergar "la chispa de la vida" a granel, su sino vital.
Vía Cherry Flava
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