¿Qué fue del hombre del Trololó?

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La velocidad a la que los memes nacen y pasan de moda es vertiginosa. Sólo los más divertidos y memorables dejan algún poso en nuestra memoria. Es el caso del famoso hombre del “trololó”, que con su pegadiza canción y rancio vídeo nos hizo soltar un montón de risas hace un par de años. ¡Y nos sigue gustando!

Lo mejor es que Edward Khil, el señor del trololó, sigue vivo, con buena salud, y más que feliz con su ganada ciber-popularidad. El cantante, ya retirado, ha vuelto a convertirse en una celebridad en Rusia, habitual de programas de TV y de vídeos como estos, donde vuelve a interpretar su famosa canción… 30 años después. Una canción con una curiosa historia detrás.

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Edward Brill, el famoso “hombre del trololó”, nació en 1934, y tuvo una infancia dura: en plena 2ª guerra mundial su guardería fue bombardeada por los alemanes. La evacuación de emergencia le separó de su madre durante varios años, que el aprovechó para desarrollar su talento musical cantando a las tropas rusas para animarles.

Por suerte, volvieron a reunirse y, hecho ya un joven de veintitantos, ingresó en el conservatorio de Leningrado en 1955. Allí descubrió su amor por la música pop. Al estilo ruso, claro.

Su carrera como intérprete, especialmente en los 60, fue fulgurante. Ganó varios concursos y premios, y actuó en los festivales más importantes de la Unión Soviética. Tal era su popularidad que Leningrado le nombró “símbolo de la ciudad” en 1974.

Por supuesto, Occidente permanecía ignorante de su talento y éxito.  Edward giró por 80 países y enseñó música en la misma escuela donde el aprendió, hasta retirarse ya entrado el nuevo milenio… Lo que no sabía es que  Internet iba a darle, por fin, la fama que se le negó en el resto del mundo.

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En 2009, y tras una repetición de una antigua actuación en un canal digital ruso, un fan se decidió a digitalizarla, y comenzó uno de los memes más longevos y exitosos de la historia de Internet. Un ya maduro Edward cantaba feliz una canción sin letra, solo un trololo universal en su habitual tono de barítono, con algún momento a lo canto tirolés.

La canción se llamaba originalmente “Estoy muy contento de volver a casa” y, en principio, tenía letra. ¿Por qué, entonces, conocemos nosotros esta versión en la que no dice nada? Existen dos teorías.

Una habla de la polémica en torno a ciertas frases de la canción, sobre un cowboy que regresa al hogar en un coche americano: ¡demasiadas concesiones al enemigo de la URSS! Por cierto: antes de que llegara el éxito en voz de Kril, el tema fue interpretado originalmente por el cantante Muslim Magomayev, el llamado "Sinatra Soviético", cuya versión incluye un silbido que no tienen posteriores covers.

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La otra teoría sostiene que nuestro protagonista y el creador de la letra tuvieron una discusión: el letrista sostenía que esta era tan importante o más que la música, así que en la siguiente actuación en TV, Edward decidió interpretar el tema… sin letra, utilizando solo su ahora famosísimo “trololo”. Finalmente el tiempo dio la razón a Edward: fue su versión sin palabras la que se hizo tan famosa.

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Brill ha vuelto a conceder entrevistas y a aparecer en medios de todo el mundo. “¿Dónde estaban hace 40 años?”, se pregunta su hijo. Por desgracia, y como el hombre ya tiene una edad, la petición online para que vuelva a actuar no ha tenido el efecto deseado.

Eso sí: no han faltado imitadores de todo tipo, como los que hemos ido viendo en este artículo. Es normal: ¿quién no se ha puesto a cantar el trololo en alguna fiesta o reunión de amigos?

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Nuestro héroe nos dedica en estas fechas navideñas el bonito vídeo que abre el artículo. Y si son fans de la canción pop melódica, les aconsejamos que investiguen en la discografía de este hombre: tiene un montón de canciones revindicables. ¡De verdad!