No todos los musulmanes deben llevar a cabo el ayuno y el consumo de bebida y el Corán establece las excepciones. Así, este libro revelado determina que los enfermos crónicos o terminales, las embarazadas en avanzado estado de gestación, las mujeres que están con la menstruación, los niños pequeños o aquellas personas que realizan actividades físicas pueden no llevarlo a cabo.
"Cada persona es muy libre de hacerlo como quiera, ya que la religión forma parte de la práctica individual y realmente no es competencia de una autoridad religiosa decir lo que se tiene que hacer", explica el vicepresidente de la Junta Islámica de España, Mohamed Escudero. Escudero afirma que no se puede ayunar si esto supone "un riesgo grave para la salud y hay que saber calibrar".
Las personas que no ayunan, la mayoría de ellos lleva a cabo otro de los pilares fundamentales del islam: la limosna. "Depende de cada comunidad. Algunos donan lo correspondiente a la comida de un día de una persona a la comunidad y otros lo entregan a algún conocido que sabe que lo puede necesitar", concluye Escudero.
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