A Mac OS X Lion no se le ven las garras, al menos no todavía

  • Las características mostradas hoy por Apple de la nueva versión de su sistema operativo no despiertan precisamente pasiones.
Mission Control en acción
Mission Control en acción
lainformacion.com
Wicho / Microsiervos

Tras meses centrada en lanzamientos en el entorno de dispositivos iOS con el iPad, el iPhone 4 y el nuevo iPod Touch, Apple ha realizado hoy una presentación bautizada Back to Mac, De Vuelta al Mac, en la que sus ordenadores y su sistema operativo eran el tema central.

Tras un repaso a las cifras de ventas, crecimiento, cuota de mercado, y desarrolladores implicados con la plataforma a cargo de Tim Cook, el responsable de finanzas de la empresa, le tocó el turno a la nueva versión del paquete de aplicaciones básicas de Apple.

iLife 11, disponible ya, que vendrá gratis con todos los Macs nuevos y estará disponible como actualización por 49 euros, incluye mejoras en todas ellas, aunque hoy la presentación se centró en algunas de las que incorporan iPhoto, iMovie y GarageBand.

Después de esto, Steve Jobs anunció FaceTime para Mac OS X, la aplicación que permite hacer videoconferencia con otros usuarios de Mac y con los dispositivos iOS que la soportan, que está disponible en una versión beta también desde hoy.

Y entonces llegó el que para mi fue el momento más anticlimático de la presentación, en el que se pudieron ver algunas de las novedades de Mac OS X Lion, la próxima versión del sistema operativo de Apple cuyo lanzamiento está previsto en principio para el verano que viene.

La idea es aprovechar algunas de las cosas que la empresa ha aprendido con iOS y llevar las que sean oportunas al Macintosh, y de ellas hemos podido ver:

La incorporación de gestos multi toque, pero no en las pantallas de los ordenadores, que según Jobs es algo que es tremendamente cansado, sino en los trackpads, tanto los incorporados en los portátiles como en el externo, y en los ratones Magic Mouse.Una Mac App Store desde la que los usuarios podrán comprar aplicaciones que se descargarán y actualizarán automáticamente, aunque en realidad descargar una aplicación de una web e instalarla no es muy complicado, y muchas de ellas ya incorporan mecanismos de actualización automática. Lo que pasa es que para Apple puede ser una jugada interesante porque igual que con la App Store para iOS, se queda con un 30% de los ingresos de los desarrolladores que vendan a través de ella. No habrá que esperar al próximo verano para verla en acción, por cierto, sino que en 90 días estará disponible ya para Snow Leopard, y desde noviembre los desarrolladores pueden ir enviando aplicaciones para su aprobación.Aplicaciones a toda pantalla cuando se están ejecutando, como en los dispositivos iOS, lo que puede ser más o menos interesante para centrarse en una tarea, pero que tampoco es excesivamente novedoso; de hecho ya es posible hacer algo muy similar hoy en día ocultando el resto de aplicaciones abiertas.En Lion las aplicaciones también guardarán de forma automática, igual que sucede en iOS, pero de nuevo hay aplicaciones que ya lo hacen, y también volverán a arrancar de nuevo en el estado en el que quedaron, con ventanas y documentos en las posiciones en las que se dejaron al salir. La diferencia es que ahora no dependerá de cada aplicación hacer esto sino que el sistema operativo será el que ofrezca este tipo de servicios.Launchpad es una nueva función que, de manera similar a las pantallas en las que se colocan las aplicaciones de un iPhone o un iPad, permite tener a mano las aplicaciones que se desee, ordenadas y organizadas a gusto del usuario. Se accede a él desde su icono en el dock, y de nuevo tampoco es nada que utilidades de terceras partes no ofrecieran ya de alguna forma.Y, finalmente, Mission Control, que presenta en una única vista todas las aplicaciones y ventanas que estén abiertas en cada momento; es como Exposé, Spaces y Dashboard todo en uno. Jobs no dijo si va a ser una forma más de manejarse por el Mac o bien si va a sustituir a las otras, pero, curiosamente, a mi me parece que Mission Control sería mucho más útil en un iPad, por ejemplo, cuando este reciba laactualización del sistema que le permita ejecutar varias aplicaciones a la vez, actualización que está al caer.

No hay que olvidar, en cualquier caso, que lo que Apple enseñó hoy es una versión de desarrollo, y que puede tener ases guardados en la manga para cuando salga en verano.

Pero, al menos por ahora, esta la actualización menos excitante de los últimos años, con la salvedad, quizá, de Snow Leopard, que se centró en reescribir cosas "por dentro" para ganar prestaciones y preparar el terreno para futuros desarrollos.

La presentación incluyó también dos nuevos MacBook Air, que también incorporan lo aprendido con el iPad, muy delgados y ligeros, con un diseño espectacular, pero que para mantenerse en un precio más o menos razonable sacrifican velocidad de procesador y capacidad de almacenamiento.

De todos modos, este nuevo diseño y las nuevas características como la del encendido instantáneo y la gran duración de la batería irán sin duda pasando al resto de la gama de portátiles con el tiempo, así que probablemente será cuestión de armarse de paciencia.

En resumen, una presentación un tanto floja, aunque a lo mejor es que después de lo del iPad y del iPhone 4 estábamos mal acostumbrados.

Mostrar comentarios