El csic inventa un sensor para proteger a las obras del arte del aire, la luz y la contaminación


El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha desarrollado el primer dispositivo que mide la acidez del aire, para vigilar la exposición nociva de las obras de arte a la luz o la contaminación ambiental.
Según informó este jueves el Consejo, su patente está compartida al 50% entre el Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CSIC) y la Universidad Politécnica de Madrid.
La superficie de este sensor "de bajo coste" reacciona con los contaminantes y otras partículas del aire y cambia de color en función de su concentración, por lo que "cualquier usuario no cualificado podría monitorizar el pH ambiental a simple vista", gracias a una escala cromática previamente definida.
Ante un pH normal, el dispositivo presenta un tono rosado, que va perdiendo color hasta volverse amarillo con el aumento de la acidez. Por el contrario, cuando el contenido ácido del ambiente disminuye, la superficie del sensor se torna violeta.
El equipo ha desarrollado también un sistema capaz de transformar la señal óptica registrada por el sensor en una señal eléctrica. De esta forma, la información puede ser transmitida y almacenada en un ordenador.
Gracias a ello, serán posibles otras aplicaciones en cuestiones relacionadas con la calidad ambiental, como el control de humos y de vertidos industriales.
Para comprobar la efectividad del sensor, el equipo lo validó previamente en diversos edificios del patrimonio construido como el Palacio Real de Milanów de Varsovia (Polonia), el fondo documental de la Biblioteca Tomás Navarro de Madrid y la Real Fábrica de Vidrios y Cristales del Real Sitio de San Ildefonso (Segovia).

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