El viento de los asteroides arrasaría más vidas en la Tierra que un impacto si no fuera total

M.T.

Mucho se ha escrito sobre la posibilidad de que los asteroides acabaran con la vida en la Tierra. De que impactaran y provocaran su desaparición. También se ha escrito mucho sobre misiones a lo Armageddon para evitarlo. Lo que ahora han puesto encima de la mesa investigadores del Reino Unido es que serán los vientos de los asteroides los que acabarían con más vidas en la Tierra.

Investigadores de la Universidad de Southampton han calculado el número de víctimas humanas que resultarían en tres escenarios de impacto diferentes: un meteorito que explota en el aire por un choque con otro, que un meteorito que golpea el suelo y uno que salpica al océano.

En cada escenario, se determinó que la mayoría de las muertes serían el resultado de una huracán de viento, que provocaría un calor increíble, y la destrucción de rocas y paredes. El efecto, claramente, dependería del tamaño, composición y velocidad de los asteroides. También sería vital la zona en la que aterrizaría el meteorito.

A continuación, desarrollaron dos de los escenarios en estudios de casos más detallados para ilustrar los efectos de un asteroide golpeando un área poblada.

El primer escenario comparó un objeto hipotético de 50 metros de ancho que impactaría tanto en Berlín como en Londres con un segundo objeto de 200 metros de ancho. Formaría un tremendo cráter. La velocidad de impacto se calculó a 20km por segundo con un ángulo de entrada de 45 grados. Los resultados desvelados son devastadores: La carnicería total de esta explosión en el aire y los vientos que provocarían se calcularon en 1,2 millones de muertes en Berlín, y 2,8 millones muertes en Londres.

Si contamos también las muertes provocadas por el cráter, hablaríamos de 3,5 millones de de muertos Berlín y 8,8 millones en Londres. La mayoría de las muertes estarían provocadas por el viento. El 85% moriría al salir por los aires y golpearse contra cualquier cosa.

Si la roca golpea el suelo, el viento resultante de la explosión provocaría aproximadamente la mitad de muertes. Un cuarto de los muertos serían consecuencia de los efectos térmicos y otro tercio solo de la onda provocada por el impacto.

El segundo escenario exploró la caída de un asteroide similar de 200 metros de ancho en la parte superior de Río de Janeiro en Brasil. En Río, la pendiente de la tierra actúa como un amortiguador para el tsunami que provocaría el impacto.

También en Brasil, el viento sería el responsable de la mayor pérdida de vidas -de los 29.998 brasileños que morirían en el caso de que un meteorito llegara a 100 kilómetros del las costas, el 92 por ciento fallecería por culpa de los vientos y el resto por el golpe de la ola en la costa.

Si la roca golpeara el agua un poco más cerca, a sólo 10 kilómetros, de las 1,4 millones de muertes proyectadas, el 60 por ciento provendría de daños por el viento, y poco más de un tercio por una explosión inmediata de calor.

Pero antes de invertir en un refugio antiaéreo, hay que tener en cuenta que la posibilidad de que un asteroide golpee la Tierra se da aproximadamente una vez cada 40.000 años. Sólo hay un 0,01 por ciento de probabilidades de que sea una realidad en el próximo siglo.

El estudio se publicará en una próxima edición de Meteoritics and Planetary Science , pero el avance ya está disponible en la web arXiv.org .

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