Nokia demanda (de nuevo) a Apple, pero sigue dando tumbos

  • En esta ocasión son el iPhone 3G y el iPad los que según el fabricante finlandés infringen cinco patentes suyas

Según la nota de prensa de Nokia las patentes están relacionadas con tecnologías relacionadas con la transmisión mejorada de voz y datos, usar datos de posicionamiento en las aplicaciones, e innovaciones en la configuración de las antenas que dan mejores prestaciones y ahorran espacio, permitiendo fabricar dispositivos más pequeños y compactos.

Lógicamente Nokia considera estas innovaciones patentadas como muy importantes para el éxito de la empresa ya que permiten prestaciones y diseños mejorados en los productos que los incorporan.

Con esta, tal y como recuerdan en Gizmodo, ya son cinco las acciones legales pendientes entre ambas empresas, y no sería de extrañar que de nuevo Apple contraatacara con una nueva demanda.

Es lógico que cualquier empresa quiera proteger lo que considera que es suyo, pero personalmente no deja de parecerme que estas demandas de poco van a servir a Nokia para recuperar el terreno que está perdiendo en la prestigiosa y jugosa en cuanto a beneficios gama de los teléfonos inteligentes.

De hecho, el N97, un teléfono que sobre el papel tenía todas las especificaciones para ser un gran teléfono y que ocupaba un puesto muy alto sino el más alto de la gama de Nokia, resultó ser una decepción, como incluso Anssi Vanjoki, Vicepresidente Ejecutivo de Nokia, llegó a reconocer.

En este sentido, Olli-Pekka Kallasvuo, el presidente de la empresa, decía ayer en un comunicado a los accionistas durante su junta general anual [PDF 81 KB], que la empresa está trabajando duro en recuperar su relevancia en el citado segmento y que tiene una nueva generación de dispositivos preparada para este año que le ayudará con ello.

Personalmente, y aunque se que Nokia vende millones y millones de teléfonos, muchos más que sus más inmediatos competidores juntos, cada vez se me viene más a la cabeza el dicho aquel de que el cuerpo de un dinosaurio de los realmente grandes podía haber muerto un rato antes de que su cerebro se diera cuenta de ello.

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