El Tesoro arrasa gracias al BCE: coloca todo lo previsto y mucho más barato

España ha pasado con nota la prueba del mercado: ha captado 3.502 millones de euros en bonos a 2, 3 y 4 años, el objetivo máximo que se había fijado, y lo ha hecho pagando unos intereses más reducidos que en anteriores subastas de este tipo de deuda.

En concreto, el Tesoro Público se había propuesto colocar entre 2.500 y 3.500 millones y, al final, no ha tenido problemas para vender los tres tipos de deuda previstos.

Por un lado, ha colocado 682 millones en bonos a dos años (con vencimiento el 30 de abril de 2014) a un interés medio del 2,798%. Esto significa que ha pagado un 40% menos por vender este tipo de deuda, ya que la anterior referencia para este plazo es un 4,706%.

También ha adjudicado otros 1.430 millones en deuda a tres años (que vence el 30 de julio de 2015), por la que ha ofrecido un rendimiento del 3,676%. Es decir, le ha salido un 27,7% más barato que en la subasta precedente (cuando desembolsó un 5,086%).

Por último, ha colocado otros 1.390 millones en bonos a cuatro años (con vida hasta el 31 de octubre de 2016), por los que ha tenido que pagar un 4,603%, más de un punto por debajo de la anterior referencia. A este plazo, el coste de financiación se ha reducido un 23%.

Otro dato a destacar de la emisión, la primera del mes de septiembre, es que las peticiones para adquirir deuda española que ha recibido el Tesoro por parte de los inversores han superado los 6.400 millones de euros.

Lo que deja el ratio de cobertura (veces en que la demanda supera la oferta) alrededor de 1,84 veces. Es decir, la cantidad solicitada ha sido casi el doble que la colocada finalmente (3.500 millones).

En el mercado parece haber gustado el resultado de la subasta, porque la prima de riesgo sigue tranquila alrededor de los 480 puntos básicos, mientras que la bolsa mantiene su subida del 1,5%.