España ha conseguido colocar 3.953 millones de euros en bonos a tres y cuatro años, la cantidad máxima prevista, aunque ha tenido que pagar más intereses a los inversores. En concreto, el Tesoro ha pagado un 12,5% más de rentabilidad que en la anterior emisión de este tipo de deuda, celebrada el 7 de abril.
En medio de un nuevo ataque de nervios en los mercados por la situación financiera de Grecia, el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha colocado 2.752,87 millones de euros en bonos a tres años y con un coste de financiación marginal del 4,051%, frente al 3,601% de la emisión del pasado 7 de abril.
El interés que ha pagado hoy España está casi un punto por encima de la media de los primeros cuatro meses del año, que se sitúa en el 3,06%.
Lo más positivo de la subasta ha sido la demanda, que ha superado en 3 veces la oferta, al situarse en 6.847,87 millones.
Por su parte, el Tesoro ha adjudicado 1.200 millones de euros en bonos a cuatro años frente a los 3.474,96 millones solicitados, con un tipo marginal del 4,244%.
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